La guerra al interior del Cartel de Sinaloa, ya se vivió en sexenios de Aguilar Padilla y Malova
EN EL BLANCO POR FERNANDO ZEPEDA
*La guerra al interior del Cartel de Sinaloa, ya se vivió en sexenios de Aguilar Padilla y Malova
*La de hoy a diferencia de las anteriores, tiene el ingrediente de que Ismael Zambada involucró al Gobernador en una supuesta reunión en la que él se dice fue traicionado
*Para el Gobernador la violencia ha disminuido y poco a poco se está regresando a la normalidad
*El titular de Seguridad dio a conocer el “parte de guerra”. Del 9 de septiembre a ayer 20, se han reportado 29 enfrentamientos y detenido a más de 40 civiles
*El Congreso del Estado a “chaleco” quiere una nueva reforma a la Ley Orgánica de la UAS. La forma es cuestionable. ¿Realmente eso quiere el Gobernador?
*Militares y Guardia Nacional fortalecen los operativos de vigilancia en Mazatlán
*El Trife revoca la resolución del Tribunal Estatal Electoral de Sinaloa en la elección para alcalde de Ahome. El proceso continúa
*La zona serrana de Concordia aún permanece en crisis de inseguridad. El área de cabañas en la sierra vecina de Durango reporta la caída de reservaciones por la violencia en Sinaloa
Aguilar, Malova y Rocha. Tres gobernadores de Sinaloa tienen hoy algo en común. A ellos les tocó vivir de cerca lo que representa una “guerra” entre facciones del Cartel de Sinaloa. Al exgobernador Jesús Aguilar Padilla le tocó vivir los enfrentamientos violentos entre el Grupo de los Beltrán Leyva y los Chapos. En el 2008, luego de la detención de Alfredo Beltrán Leyva (a) El Mochomo, comenzó una intensa guerra que convirtió en arena de disputa a Culiacán. Los enfrentamientos entre los dos grupos Beltrán Leyva y de Joaquín Guzmán (El Chapo) apoyado por su inseparable compadre Ismael Zambada, se fueron recrudeciendo. Fue en el 2010 cuando esa guerra llegó a su clímax.
Las calles de Culiacán se convirtieron en terreno de disputas sangrientas. Se llego incluso a un “toque de queda” impuesto por los delincuentes. La disputa acabó con la muerte de Arturo Beltrán Leyva. Y llegó el sexenio que encabezó Mario López Valdez (2011-2016). La violencia entre dos facciones del Cartel de Sinaloa se recrudeció. Y a diferencia de lo sucedido en el anterior sexenio que encabezó Aguilar Padilla, el Gobernador Malova quedó en medio del fuego cruzado. Los enfrentamientos más cruentos se presentaron en Culiacán y en Ahome. Uno de los guardias del Gobernador Malova fue “levantado”. Apareció después un video del agente. Luego su cuerpo fue encontrado. Pero las cosas no quedaron ahí.
El entonces Secretario de Seguridad Pública en Sinaloa Frank Córdova sufrió un atentado. Luego de una gira de trabajo del Gobernador Malova en Los Mochis donde estuvo presente Córdova, el entonces jefe policiaco se aprestaba a regresar a Culiacán a bordo de su suburban acompañado de sus escoltas. Pero de última hora el Gobernador lo invitó a que lo acompañara en su helicóptero. Esto salvo la vida de Córdova, pero no la de sus escoltas. La suburban oficial del entonces jefe policiaco fue emboscada en la carretera y sus ocupantes acribillados.
Otro episodio de la “guerra” que se vivió en el sexenio malovista fue cuando los criminales lanzaron cabezas de personas en las mismísimas escalinatas del Palacio de Gobierno en Culiacán. Estos pudieran ser los antecedentes de la actual “guerra” que dos facciones libran en Sinaloa y que han convertido nuevamente las calles de Culiacán en arena de disputas. A diferencia de las “guerras” vividas por Aguilar Padilla y Malova, la que hoy está padeciendo el sexenio que encabeza Rubén Rocha Moya, es la mención de su nombre en el supuesto “secuestro” del capo más buscado en el hemisferio, Ismael Zambada.
La carta que se conoció de Zambada aportó ingredientes que condujeron a la “guerra” que hoy libran las facciones conocidas como “los chapitos” y los “mayos”. Y colocaron en medio de esta a Rocha Moya. No es nuevo para muchos sinaloenses lo que está sucediendo actualmente en el estado. Pero eso no deja de preocupar y sembrar el temor entre cientos de ciudadanos. Hoy como ayer, esperemos que esta “guerra” pase. Y que la relativa tranquilidad en que se vive en Sinaloa vuelva a resplandecer.
Que violencia disminuyo. El Gobernador Rubén Rocha Moya lo dijo desde Guasave el día de ayer. “Lo que podemos decir es que (la violencia) ha reducido…Pero no es un tema resuelto”. El Secretario de Seguridad Pública en Sinaloa Gerardo Mérida Sánchez dio a conocer una especie de “parte de guerra”. Del 9 de septiembre al día de ayer 20, dijo el jefe policiaco se registraron oficialmente 29 enfrentamientos, decomisado más de 120 armas de diversos calibres y poco más de 75 vehículos. En estos enfrentamientos se ha logrado la detención de más de 40 civiles involucrados en esas actividades y asegurado más de 30 mil municiones.
Para Mérida Sánchez los logros alcanzados han permitido que poco a poco la normalidad regrese a las calles de Culiacán y en los otros municipios en donde los grupos armados han sostenido enfrentamientos. El jefe policiaco destacó que desde hace cinco días dejaron de reportarse “bloqueos” de carreteras e incluso los reportes de civiles armados. Pareciera, como dijo el Comandante de la Tercera Región Militar en Sinaloa General Francisco Jesús Leana Ojeda, el final de la violencia en el Estado depende de que los grupos delincuenciales dejen de enfrentarse. Y tal parece eso está sucediendo. Pero nadie puede estar confiado.
¿Eso quiere Rocha?. El Congreso del Estado en sus últimos estertores, pues le quedan tan solo 10 días para que estos diputados concluyan con su periodo, ya mostró que busca sacar sea como sea la reforma a la Ley Orgánica de la UAS. Feliciano Castro y sus seguidores en el Congreso saben perfectamente que el argumento de su famosa “consulta” fue un fracaso. Y aún así, han seguido adelante con su proceso de reforma. Habiendo podido con inteligencia, dialogo y concertación sacar un proceso limpio que conduzca a la reforma a la Ley Orgánica universitaria, decidieron hacerla por el camino más sucio, violentando todo, atropellado la Ley. ¿Esto es lo que realmente quiere el Gobernador Rocha Moya?.
Teniendo todos los elementos a su favor, el Gobernador debería de ser el primero en poner un freno a las barbaridades que se están cometiendo. Y si no lo hace, entonces tendrá que cargar con las consecuencias que puedan originar estos atropellos. Tal cual está pasando con la violencia que vive en estos momentos Sinaloa, lo que pudiera avecinarse es otro frente, con los estudiantes, maestros y trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Fortalecen seguridad en Mazatlán. Elementos del Ejército, Marina y de Guardia Nacional han reforzado los operativos de vigilancia en Mazatlán a raíz del asesinato de un oficial de la policía municipal. El Alcalde Edgar González apenas fue enterado del suceso, solicitó al Gobierno Federal una mayor presencia de sus elementos para desalentar la presencia de delincuentes que pretendan convertir a Mazatlán en algo parecido a lo que ha sucedido en Culiacán. Los patrullajes de las unidades militares, así como de la Guardia Nacional se han intensificado. Su presencia se nota más desde el día de ayer.
Trife caso Ahome. Ayer quien fuera candidato a la alcaldía de Ahome Mingo Vázquez dio a conocer que el Tribunal Federal Electoral, en su sala regional de Guadalajara, “revocó” el resultado de la elección dado por el Tribunal Estatal Electoral de Sinaloa a favor de Gerardo Vargas Landeros. El excandidato de oposición dio a conocer a través de redes “que se sepa que Gerardo Vargas Landeros no es el legitimo ganador de la alcaldía de Ahome”.
Habrá que ver el procedimiento que sigue. La resolución del Tribunal Electoral de Sinaloa la revocó el Trife. Y tendrá que regresar para una nueva revisión. Habrá que seguir de cerca este tema que sin duda ha dado mucho que decir.
La sierra en crisis. Habitantes de las comunidades serranas de Concordia se niegan a regresar en estos momentos a sus lugares. Salieron huyendo por la violencia desatada entre grupos criminales. Piden que el Gobierno del Estado sea consciente de lo que están padeciendo fuera de sus pueblos, en otros lugares en donde no saben qué hacer. Sumado a este delicado problema de seguridad en las poblaciones serranas de Concordia, propietarios de cabañas de la zona serrana de Durango reportaron que las reservaciones se cayeron. Los visitantes que tienen en su mayoría de Mazatlán, decidieron no viajar a las cabañas a pasar días de descanso y disfrutar de la naturaleza, por la inseguridad que provocaron los enfrentamientos en Sinaloa. Lo peor es que reconocen que este problema no se sabe cuanto más durará.
