El capo, quien supuestamente sufría de disfunción eréctil, se habría operado varias veces para mejorar su potencia sexual.

La reciente captura de Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los líderes cofundadores del Cártel de Sinaloa, ha puesto en el centro de atención detalles reveladores sobre su salud que, a su vez, han revivido historias y anécdotas sobre el notorio narcotraficante y sus socios.

Recientemente se conoció que Zambada, quien padece de diabetes desde hace más de 40 años, contaba con una caja de tráiler acondicionada como clínica móvil, donde recibía atención médica. La instalación, de 40 pies de altura, estaba condicionada para hacer cualquier tipo de intervención quirúrgica.

Anabel Hernández, periodista especializada en narcotráfico, había señalado en su libro “La historia secreta. AMLO y el Cártel de Sinaloa” que El Mayo Zambada usaba esta clínica para tratar su enfermedad y otros problemas de salud, como una rodilla que se inflama con regularidad y debía drenarse.

En esta clínica, Mayo Zambada también facilitó sus instalaciones a Joaquín El Chapo Guzmán en una ocasión, permitiéndole someterse a una operación para presuntamente mejorar su potencia sexual.

En un reciente video publicado en el canal de YouTube de Ocran Leaks—cuya identidad se sospecha que es la de Dámaso López Serrano, alias el Mini Lic—se revelaron detalles sobre una clínica móvil que pertenecería a Ismael El Mayo Zambada.

Con información de Infobae

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