Uno de los siete “policías” detenidos es escolta del narco
Estaban cuidando a dos heridos de bala, uno de ellos un agente de la fiscalía estatal al servicio de los “Chapitos”.
De ese nivel es el cinismo con el que el gobierno de Sinaloa protege a los criminales.
Gatilleros están dados de alta como agentes, y con el apoyo oficial trabajan para sus patrones los narcotraficantes.
Por eso el montaje ordenado por el gobernador para mentirnos sobre lo sucedido en una clínica privada el lunes por la noche.
De la mentira oficial sobre “civiles en patrullas clonadas” que agredieron a policías municipales, al hecho real de que agentes en activo de la policía de Culiacán recibieron a balazos a elementos de la Policía Estatal Preventiva.
Les comparto el link del video completo con el título de “Escolta de ‘El chapo’ entre los municipales detenidos en Sinaloa”:
Puede ser “el último coletazo”, dice Luis Chaparro en ese video.
Ojalá sea cierto, porque esto de que uno de los siete policías detenidos es escolta del narco significa otra exhibida brutal.
Recordemos lo que Claudia Sheinbaum dijo en su más reciente visita a Sinaloa: el gobernador Rubén Rocha Moya “está haciendo su trabajo en seguridad”.
Esto es lo que nos han aplicado, con una presidenta que se burla sin descanso de los sinaloenses.
La explicación es muy clara: los narco políticos están en el gobierno de Sinaloa… y también en palacio nacional.
DE LA SUPREMA CORTE AL CÁRTEL DEL ACORDEÓN
Con descomunales hipocresías, la chacha de palacio y sus lambiscones presumen el “logro” de la Suprema Corte al cártel del acordeón.
Primero, las mismas cifras oficiales, manipuladas al alza, dan fe del tremendo fracaso en la elección judicial.
Conclusión, quienes fueron “electos” carecen de legitimidad.
Solamente alrededor de cinco millones de votos supuestamente válidos, incluyendo las mapachadas.
Como sabemos, hay millones de boletas nulas sin voto o con mensajes de repudio contra el gobierno.
Así entonces, el fracaso fue mucho mayor.
Pasamos de la Suprema Corte al cártel del acordeón, con un poder judicial en poder de morena y del crimen organizado.
Nada de que tendremos justicia; muchos de esos ministros, magistrados y jueces trabajan y seguirán trabajando para los narcos y para la dictadura partidista.
No vengan pues con sus hipocresías de que la “renovación” judicial es altamente favorable para México y los mexicanos.
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