Por Carlos Salas
El presidente de la Comisión de los Derechos Humanos de Sinaloa (CEDH), Óscar Loza Ochoa declaró respaldar la iniciativa de las autoridades para rehabilitar el viejo Hospital General de Culiacán para atender a las personas que sufrieron de un ataque armado.
Ésta propuesta se presentó en un contexto violento donde el personal de salud del estado fue atacado con arma de fuego en diversas ocasiones por cumplir con su labor.
“La autoridad dijo que iban a habilitar el viejo hospital, pero tienen razón quienes trabajan allá cuando sienten que hay molestias excesivas para el personal médico, pero yo digo que la lógica indica que así sea para evitar homicidios que ya se han dado en hospitales”, subrayó Loza Ochoa.
Asimismo, el diligente subrayó que las medidas para atender a las personas que llegan con heridas de bala deben ser “duras, fuertes y extremas” para evitar exponer al personal de los hospitales.
“De alguna manera salva la situación de ellos y acá está sin usar actualmente (el viejo Hospital General), pero les digo que eso puede ayudar a que las medidas estén muy orientadas a un lugar específico, que serían estas instalaciones y quizá haya menos molestia para los usuarios en general del hospital y del personal médico.
“Quizá haya menos molestia para los usuarios en general, tanto de los pacientes como del personal médico”, concluyó el representante del CEDH.
Cabe resaltar que el pasado jueves, Noroeste reportó que personal médico del Hospital General de Culiacán se manifestó en las instalaciones del edificio tras un presunto intento de homicidio dentro de las instalaciones.
La manifestación exigió a las autoridades correspondientes que los heridos de bala sean atendidos en otras instalaciones, como el Hospital Militar en Mazatlán, pues los heridos por impacto de bala que llegan al nosocomio pueden representar un alto riesgo para el personal médico y los pacientes.
Tras los ataques reportados en el puerto de Altata, en el municipio de Navolato, Sinaloa, Rubén Rocha Moya, gobernador del estado, anunció un nuevo plan integral de apoyo que entró en vigor a partir del pasado 22 de septiembre.
El plan de apoyo consiste en desplegar elementos de seguridad estatales, así como personal del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF) y Protección Civil.
Rocha Moya señaló que la medida buscará facilitar la reactivación económica del sector restaurantero y comercial, así como brindar apoyo a la familias que tengan percepciones de inseguridad en la zona por medio de programas de Bienestar y asistencia social.
Con información de Infobae