Llegó el jefe retenes a Juárez “castigado” de Sinaloa
-Comidita Shangri La para matar grillas
-Banxico contra la pared
Era cuestión de tiempo para que adquiriera mayor dimensión ese asunto de los insólitos retenes instalados por “hambrientos” policías de la Fiscalía General de la República (FGR) en varios puntos de las carreteras del estado.
Ha quedado en lo totalmente obvio que los retenes son instalados con el mero propósito de los agentes por hacerse de dinero fácil a costa de los conductores de vehículos chicos, medianos; y sobre todo, traileros. Muchos de ellos deben pagar extorsiones de 100, 200 y hasta mayor cantidad de dólares por cualquier “detalle” que les sea observado por los voraces agentes.
Lo obvio salta de que tales puntos de revisión no forman parte de las planeaciones semanales conjuntas entre corporaciones de seguridad, y por lo tanto, no hay ahí representación de derechos humanos ni de otras policías.
Otra obviedad es que al frente de esa policía federal fue colocado Mauricio Rafael Romero Gutiérrez, quien fue traído a Chihuahua-Juárez como “castigo” por conductas similares de abusos y extorsiones cometidos en pleno corazón de la guerra Chapos-Mayos, Sinaloa.

