Cártel de Sinaloa disputa seis municipios a grupos locales de Guatemala
Un reporte de la policía guatemalteca explica cómo el cártel mexicano aprovecha la caída de dos líderes en la frontera.
Roxana González
El gobierno de Guatemala tiene identificados seis municipios en la frontera con México que el Cártel de Sinaloa disputa a los grupos locales criminales de Los Huistas y el Cártel Chiapas y Guatemala, que perdieron a sus principales cabecillas este año.
De acuerdo con un reporte interno de la Policía Nacional Civil (PNC), al que El Sol de México tuvo acceso, el Cártel de Sinaloa ha buscado conquistar este terreno desde marzo pasado.
Aler Baldomero Samayoa, alias el Chicharra, es el líder de Los Huistas. Fue detenido en México y posteriormente extraditado a Estados Unidos, desde entonces el Cártel de Sinaloa pelea municipios como Nentón, Santa Ana Huista, La Democracia y Cuilco, en Huehuetenango, uno de los departamentos de Guatemala considerados clave para la nación centroamericana por su cercanía con la frontera de México.
El cártel mexicano también ha querido aprovechar la muerte de Baldemar Calderón Carrillo, alias Tío Balde, el principal líder del Cártel Chiapas y Guatemalapara apoderarse de otros municipios como Tacaná, en el departamento de San Marcos y la Finca El Esquino, en Nentón.
La muerte de Tío Balde ocurrió durante unenfrentamiento el 8 de junio con integrantes de las Fuerzas de Reacción Inmediata, también conocidos como Pakales, un grupo de élite policial creado por el actual gobernador chiapaneco Eduardo Ramírez.
Ataques y violencia en Guatemala
Los seis municipios han sido blanco, en los últimos meses, de ataques, combates y asesinatos entre rivales, provocando el desplazamiento de decenas de pobladores que huyen de la violencia, de acuerdo con el reporte de la PNC. Según la policía guatemalteca, el Cártel de Sinaloa ha dejado mensajes en al menos tres de los seis municipios disputados.
Los ataques, de acuerdo con el reporte, han sido con drones improvisados, como los que utilizan los cárteles mexicanos de este lado de la frontera.

“Hay una reestructuración de los criminales en Guatemala porque este año cayeron sus líderes, pero eso no significa que estén muertos, siguen operando y tienen el control de los departamentos fronterizos con México, los mismos que los de Sinaloa quieren apoderarse como sea”, dijo Helver Beltetón, quien fue jefe de la subdirección general de análisis e información antinarcóticos de la PNC, durante el gobierno del entonces presidente Alejandro Giammatei.
En entrevista, agregó que el cártel liderado por los hijos de El Chapo Guzmán busca tomar ventaja de la lucha que mantienen Los Huistas y Chiapas y Guatemalapor el control de territorio, pero además del tráfico de drogas y migrantes.
En su opinión, la incursión a territorio guatemalteco de integrantes de los Pakales, que concluyó con la muerte de Tío Balde, abrió las puertas al Cártel de Sinaloa para que intentara derrocar los bastiones de los cárteles locales en la frontera.
“Se interpretó como un debilitamiento de la estructura criminal de los dos grupos guatemaltecos del narcotráfico, los que había que aprovechar para avanzar en la lucha por el territorio”, explicó el ex funcionario.
El esquema de tráfico de drogas
De acuerdo con la información de la PNC, basada en acciones de inteligencia, las operaciones ilícitas de Los Huistas quedaron a cargo de Eugenio Darío Molina, alias Don Darío o El Botas, mientras que el Cártel Chiapas y Guatemala es dirigido por Walfre Donaldo Calderón, alias el Teniente, hijo de Calderón Carrillo.
Los Huistas son uno de los grupos del narcotráfico más poderosos de Guatemala. Sus lazos de larga data con empresarios, funcionarios de seguridad y políticos les han permitido dominar el crimen organizado en partes del noroeste de la nación centroamericana, según señala la organización internacional InSight Crime.
En un informe sobre esa organización criminal, publicado en marzo pasado, la organización agrega que a pesar de que tradicionalmente han estado ligados a organizaciones criminales mexicanas, principalmente con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), con el tiempo Los Huistas han ganado un alto nivel de autonomía.
Han pasado de ser simples transportistas de drogas, a manejar la importación de precursores químicos de China y a producir metanfetamina para la exportación a Estados Unidos. Además, según la Oficina Antidrogas de Estados Unidos (DEA), controlan cultivos de amapola para la producción de heroína en regiones montañosas de Guatemala.
El Cártel Chiapas y Guatemala por su parte, es un grupo relativamente nuevo que ha mantenido una guerra sigilosa con sus rivales Los Huistas y últimamente contra el Cártel de Sinaloa. Además del tráfico de droga y producción de metanfetaminas han incursionado en la extorsión y el secuestro, señala la información de la PNC.
Con información de El Sol de Mazatlán

