Rubrican convenio de colaboración La UAS y el gobierno del Estado; Evidente la finalidad política

Agenda Política

= Obvios compromisos y obligaciones de las partes
= De nuevo, Cuen en medio de la discrepancia
= En Sinaloa es posible ser hombre o mujer a voluntad
= En puerta, designación del nuevo presidente del PRI
= Y Quirino Ordaz Coppel un hombre ¡feliz, feliz, feliz…!

Jorge Luis Telles Salazar

Las discrepancias entre el gobernador Rubén Rocha Moya y su secretario de Salud, Héctor Melesio Cuen Ojeda, no solo son inocultables a estas alturas sino que la tendencia a agudizarse es creciente, así intenten negarse tanto de una parte como de la otra. Las alusiones a Cuen, en la Semanera del lunes próximo pasado, fueron directas y contundentes.
Por eso es que alcanzó especial relevancia la visita de Rocha a la Universidad Autónoma de Sinaloa, donde fue atendido directamente por el rector actual, Jesús Madueña Molina, con la intención de rubricar un convenio entre ambas partes a fin de trabajar en conjunto por el desarrollo científico, educativo, académico y cultural de la centenaria institución, cuyos efectos positivos se derivarían a todo el Estado en general.
Cuen anduvo por ahí también, en su calidad de ex rector y de personaje indiscutiblemente ligado a la universidad.
Ese convenio lo calificó el rector Madueña como un instrumento que “amplía las posibilidades de sumar para el desarrollo de Sinaloa, puesto que abre espacios en la realización de alianzas estratégicas en las que cada parte aportará la parte que le corresponde en beneficio de nuestra sociedad”, al tiempo que le agradeció a Rocha su decidido respaldo en favor de la viabilidad financiera de la universidad”.
Todo bien, en efecto.
Sin embargo, la duda surge: ¿para que un convenio formal entre el gobierno del Estado y la Universidad Autónoma de Sinaloa…?
La UAS, en tanto universidad pública, opera con recursos procedentes tanto del gobierno federal como del estatal -impuestos aportados por los contribuyentes, por supuesto-, lo que convierte en obligatoria la función de la actual administración de no solo respaldar financieramente a nuestra máxima casa de estudios, sino de vigilar la correcta aplicación de los recursos y de darle seguimiento al cumplimiento de la misión y la visión de la universidad.
Es obligación del gobierno y compromiso, a su vez, de la UAS. ¿Será necesario un convenio para que cada parte asuma y cumpla con su papel?
Más bien, todo esto parece derivarse de una preocupación del gobernador Rocha Mocha, ante una posible interpretación equivocada de los universitarios, como derivación directa de sus posicionamientos respecto a Héctor Melesio Cuen Ojeda, quien es todavía su secretario de salud; pero que no deja de presidir el Partido Sinaloense, como lo señaló tajantemente el lunes próximo pasado.
De ahí también las expresiones de Rubén Rocha respecto a que un convenio en estas condiciones “es posible por la empatía que tenemos con la Universidad Autónoma de Sinaloa”, las que remató con una frase sin desperdicio:
-Deben estar seguros que no seremos un gobierno que lastimará a la UAS, en ningún tiempo y en ninguna circunstancia.
En fin.
De un modo u otro, se firmó un innecesario convenio entre el gobierno del Estado y la Universidad Autónoma de Sinaloa, que por lo menos cumplió su objetivo preliminar: meter el tema en los medios de comunicación; mantenerlo ahí por algunos días y puntualizar que el pleito contra Cuen es otra cosa, que nada tiene que ver con el respaldo al que el gobierno está obligado en favor de la centenaria institución.
Salvo mejor opinión, amigo lector.
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Por otro lado.
¿Sabía usted que si es hombre, pero se siente mujer o a la inversa, si es mujer pero se siente hombre, ya puede tramitar la modificación correspondiente en su acta de nacimiento, a través de una sencilla gestión ante el Registro Civil del Estado de Sinaloa?
Tan sencillo el trámite, para dejarlo claro, que ni tan siquiera tendrá que acreditar que ha sido objeto de intervención quirúrgica alguna, ni haber sido sujeto de terapias, diagnósticos o algunos otros procedimientos como mutilación o reconstrucción, tan comunes en las personas que toman la difícil pero valiente decisión de cambiar de género.
En efecto.
En su sesión extraordinaria de la semana pasada, la sexagésima cuarta legislatura del Congreso del Estado aprobó reformas en este sentido al Código Familiar, mismas que -asómbrese- fueron aprobadas por la vía de la unanimidad.
Bajo esta circunstancia, toda persona que desee cambiar su nombre y modificar, al mismo tiempo, la identidad de género en su respectiva acta de nacimiento, solo tendrá que solicitar un trámite ante un juez de lo familiar, el que, mediante una resolución, tendrá que aceptar, de acuerdo a esta modificación, la solicitud del interesado o la interesada.
Únicamente será necesario -conforme a esta modificación- “la convicción personal interna, de como la persona se percibe a si misma, lo cual puede corresponder o no al sexo consignado en su acta de nacimiento”.
Así. Así de sencillo.
Caray. Como hemos progresado.
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Mientras.
Lo que se da como un hecho, es la publicación de la convocatoria emitida por el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional para la elección de un presidente sustituto del Comité Directivo Estatal, cargo que en la práctica aún ejerce la diputada Cynthia Valenzuela, desde la secretaría general. Que no pasa de la presente semana, nos dicen.
Y bueno, es que ya desde hace días, Enrique Benítez, el delegado del CEN en Sinaloa, se reúne con las principales fuerzas priistas del Estado, con la intención de conocer sus inquietudes y unificar criterios en cuanto al nuevo presidente del PRI-Sinaloa.
Justamente, la demora en la expedición, emisión y publicación del documento, es porque todavía no se llega a consenso satisfactorio. Será hasta entonces -ni más ni menos- cuando se libere la convocatoria y se proceda en consecuencia. Ya con decisión tomada. O lo que es lo mismo: las prácticas de siempre.
¿Alguna novedad en el frente?
Ninguna.
Aarón Irizar López no se ha descartado lo cual indica que sigue firme en sus aspiraciones, las cuales se respaldan en su excelente relación con todos los grupos y en su impresionante hoja al servicio del partido, de las cámaras legislativas y de los tres niveles de gobierno en lo general.
También por ahí aparece el nombre de Faustino Hernandez, ex presidente de la Liga de Comunidades Agrarias de Sinaloa y su meta de reintegrar al PRI al sector campesino sinaloense.
Anotado, del mismo modo, Marco Osuna, sólido cuadro del Norte del Estado.
Uno más: Gomer Monárrez Lara, el candidato más ligado a los afectos del presidente del CEN, Alejandro Moreno.
Apuestas abiertas.
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Por cierto.
Karla Corrales, la actual presidenta municipal de Cosalá, renunció a las filas del Partido Sinaloense y de inmediato le abrió las puertas de su corazón al Movimiento de Regeneración Nacional. Una renuncia muy a tiempo, de cara a una probable participación en las elecciones del 2024.
¿Causas?
Simple y sencillamente -lo dijo- no estar de acuerdo con la manera en la que se conduce actualmente a este partido político.
Sentimentalmente, un golpe durísimo para el PAS, especialmente para su presidente, Víctor Antonio Corrales Burgueño, primo hermano de Karla y casi su hermano, en los hechos. Karla también es hermana de Paquis Corrales, desaparecida, desde hace años, del mapa político sinaloense.
Esto, sin embargo, no dobla al PAS, ni a su dirigencia estatal (Víctor Corrales-Angélica Díaz de Cuen) puesto que casi de inmediato anunció la integración de un centenar de personas del norte del Estado, que militaban en las filas de Acción Nacional.
Y apenas una semana atrás, el PAS también hizo público que 200 ex panistas del sur de la entidad pasaban a incrementar su fuerza política en el Estado.
Hay que reconocer que en realidad el Partido Sinaloense es el único partido de tiempo completo en nuestro estado y que por eso es el partido local de mayor reconocimiento a nivel nacional. Un partido, tiene que decirse, en actividad constante y con resultados claros en favor de la sociedad.
Suceda lo que suceda en las próximas semanas, el PAS llegará bien a las elecciones del 2024, con posibilidades reales en los comicios para presidentes municipales y diputados locales, más allá de las alianzas que deberán concretar en el curso de los próximos dos años y que podría ser, según la circunstancia, con el mismo MoReNa o con algunos de los otros partidos con presencia en el espectro político sinaloense.
Lo de Karla, sin embargo, dolió. Debe haber dolido.
Por supuesto.
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Por último.
Quirino Ordaz Coppel ha sido buscado por los principales radiofónicos del país, con tanta insistencia como en sus años dorados como gobernador de Sinaloa. Y Quirino ha hablado con soltura, seguridad y claridad. Se le advierte feliz, con todo y la terrible amenaza que pesa sobre él: su expulsión de las filas del Partido Revolucionario Institucional.
Es lógico.
Aunque en realidad nunca estuvo en peligro el proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador de llevarlo como embajador del gobierno de México en España, el camino no fue nada fácil, por las reacciones provocadas desde el momento mismo de su postulación, particularmente por los propios miembros de su partido: el Revolucionario Institucional.
Todo se cumplió, sin embargo, de conformidad con el guion: Quirino superó todos los obstáculos y ya es embajador de México en España.
El nuevo cargo de Quirino debería ser satisfactorio para toda la clase política sinaloense al igual que para la sociedad en general. Ordaz Coppel, en efecto, tiene una larga agenda por atender – en principio, recomponer las relaciones con España -; pero, seguros estamos, no se olvidará de nuestra entidad.
Ojalá.
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A manera de colofón.
Recordarle amigo lector, antes de cerrar, nuestra cita diaria, de 8: 30 a 9: 00 horas, en la mesa de análisis del noticiero Alta Voz, que se transmite de lunes a viernes a través de las emisoras del grupo Chávez Radio y que conduce el experimentado periodista Pablo Cesar Valenzuela, con la participación de Altagracia González, Francisco Chiquete y quien esto escribe. Ampliamante recomendable. Y nos vamos ya. Cuídense mucho y Dios los bendiga. Ahora y siempre.