¿Quién sería el Presidente? Esto pasaría si AMLO pierde en la consulta de revocación de mandato
El 10 de abril, más de 92 millones de ciudadanos están convocados para participar en el primer ejercicio de revocación de mandato, en el cual se decidirá si el presidente Andrés Manuel López Obrador deja el cargo por pérdida de confianza, o bien, concluye su periodo hasta el 30 de septiembre 2024, como lo marca la Constitución.
Al ser un ejercicio democrático inédito en el país, el proceso de revocación de mandato despierta muchas dudas, y una de ellas es: ¿Qué pasa si el presidente Andrés Manuel López Obrador pierde la consulta?
De acuerdo con el artículo 84 de la Constitución, séptimo párrafo, en caso de haberse revocado el mandato del Presidente de la República, asumirá provisionalmente la titularidad del Poder Ejecutivo quien ocupe la presidencia del Congreso; dentro de los treinta días siguientes, el Congreso nombrará a quien concluirá el periodo constitucional.
En este caso, si López Obrador pierde la consulta, Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, asumiría de forma provisional la titularidad del Poder Ejecutivo hasta que el Congreso nombre a quien concluirá el periodo constitucional.
“Quien ocupe provisionalmente la Presidencia no podrá remover o designar a los secretarios de Estado sin autorización previa de la Cámara de Senadores. Asimismo, entregará al Congreso de la Unión un informe de labores en un plazo no mayor a diez días, contados a partir del momento en que termine su encargo”, explica ese mismo artículo en su segundo párrafo.
El artículo 60 de la Ley Federal de Revocación de Mandato explica que, si los resultados de la jornada de votación de la ciudadanía indican que procede la revocación de mandato, la persona titular de la Presidencia de la República se entenderá separada definitivamente del cargo, cuando el Tribunal Electoral emita la declaratoria de revocación.
La revocación de mandato sólo procederá por mayoría absoluta. Cuando la declaratoria de validez que emita el Tribunal Electoral indique que la participación total de la ciudadanía en el proceso de revocación de mandato fue, al menos, del 40 por ciento de las personas inscritas en la lista nominal de electores, detalla el artículo 58 de la Ley Federal de Revocación de Mandato.
Para Jaime Cárdenas, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, la ciudadanía debería decidir, mediante una elección, quien concluya el periodo restante presidencial.
“Vamos a ver cómo funciona el ejercicio en esta ocasión, pero tal vez en el futuro sea importante pensar en una modificación a ese párrafo (artículo 84 constitucional, último párrafo) para que la decisión sea del sustituto en caso de que el Presidente pierda la revocación, que esa decisión no corresponda al Congreso sino a los ciudadanos. “Yo creo que debiera establecerse un procedimiento más afinado, se nombrara un presidente interino por unos meses y estar convocando a elecciones para que los ciudadanos elegir a quien concluirá el mandato del Presidente en turno. Creo que sería lo más democrático”, indicó en entrevista para MILENIO.
Ve riesgo de inestabilidad política
El académico advierte que, en caso de que López Obrador pierda la consulta, existe un riesgo de inestabilidad política en el país mientras se designa al Presidente sustituto, por lo que considera necesario un eventual respaldo de todos los partidos políticos en la designación de éste.
“Siempre hay un tipo de peligro porque, en la práctica, de que el Congreso nombre un Presidente sustituto o interino, creo que desde el Maximato no se ha empleado ese mecanismo (…) cuando hay una decisión de este tipo evidentemente el Congreso estará en una situación muy delicada porque si ocurriera la revocación de mandato tendrían que ponerse de acuerdo para nombrar a un Presidente que concluya el mandato.“Seguramente por la composición de las cámaras, Morena tiene mayoría de votos y ese Presidente o Presidenta sustituto tendría que resultar de la mayoría de Morena, pero sería conveniente para la estabilidad y gobernabilidad del país que hubiese un acuerdo con otras fuerzas políticas, ojalá fuera un nombramiento unánime”.
Cárdenas explicó que si ocurre el proceso de revocación se pondrá a prueba el sistema constitucional y se verá cómo actúan los legisladores.
“Cuando tiene éxito un procedimiento de revocación de mandato se pone a prueba el sistema constitucional, vamos a ver cómo actúan diputados y senadores, si son capaces de dialogar, en fin, de tomar una buena decisión, no es algo sencillo, hay un momento de inestabilidad porque uno de los poderes de la Unión, el Ejecutivo, está transitoriamente sin una cabeza”, explicó.
¿Cuál es la importancia de la revocación de mandato?
Para Jaime Cárdenas, los medios de la democracia directa, como lo es la revocación, consulta popular o referéndum, permiten que la ciudadanía tenga armas para tomar decisiones entre periodos electorales.
Una diferencia con la democracia electoral representativa es que la ciudadanía sólo se hace presente cada tres o seis años y se le da un cheque en blanco al gobernante para que tome decisiones.
“La democracia electoral representativa tiene graves problemas porque no le permite al ciudadano tomar decisiones permanentes sobre los asuntos públicos de cada país, en la democracia electoral participamos cada tres o seis años y después damos una suerte de cheque en blanco al gobernante para que decida por nosotros sin que nosotros podamos controlar el proceso de decisiones.
“A diferencia de esa situación que ocurre con la democracia electoral, con la democracia directa, entre ellos la consulta, la revocación, pues le dan al ciudadano armas para que pueda tomar decisiones importantes entre periodos electorales, es decir, se abren más posibilidades de participar en cuestiones trascendentales de un país”, indicó en entrevista el ex consejero electoral del entonces IFE.
En particular sobre la revocación de mandato, el académico reflexiona que en caso de tener un mal gobernante se pueda concluir con su encargo antes del tiempo establecido en la ley.
“Muchas veces en los países tienen gobernantes que no son adecuados, realizan políticas públicas en contra de la ciudadanía y ésta no tiene un mecanismo para destituirlos antes de que concluya el plazo. La revocación de mandato es eso, es un instrumento de democracia directa para que el ciudadano pueda antes de que concluya el plazo de un gobernante retirarle la confianza y revocarle el mandato”.
Cárdenas desea que el sistema constitucional mexicano permitiera más mecanismos de democracia directa como el referéndum para aprobar reformas a la constitución o tratados internacionales, “que a veces compromete la soberanía de México”.
¿Aplicar la revocación de mandato a un Presidente popular?
El presidente Andrés Manuel López Obrador es uno de los mandatarios con altos niveles de aceptación en comparación con sexenios pasados.
Al preguntarle al jurista sobre la viabilidad de aplicar este ejercicio en un Presidente con niveles altos de aceptación, sostuvo que es un derecho ciudadano y así debe verse.
“Así como hay sectores en la sociedad mexicana que respaldan al presidente López Obrador, hay otros sectores que no desean que continúe en el cargo. Las encuestas dicen que va a ganar el procedimiento de revocación de mandato porque hay una gran mayoría de ciudadanos que está favor de la continuidad en el encargo, es muy probable, pero vamos a ver, primero, el nivel de participación”.
“No hay que olvidar que no se trata de un derecho del Presidente ni de un privilegio el someterse o no a la revocación de mandato sino se trata de un derecho político de los mexicanos, si lo vemos desde esa perspectiva a mí me parece un ejercicio muy importante porque nunca antes la historia política y jurídica de México se había dado un procedimiento de revocación de mandato, es el primer en su género, en el México independiente y es una conquista ciudadana”.
Con información de Milenio