CIUDAD DE MÉXICO — En virtud de que la discriminación de la que son objeto las personas transgénero tiene graves consecuencias, pues los prejuicios implican que se espere a que crezcan siempre en concordancia con el género asignado al nacer y que su imagen e identidad sean acordes a esos parámetros, la senadora de la República, Imelda Castro Castro, presentó una iniciativa para reformar la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Según datos de Conapred, en 2018 la mayoría de las personas que identificaron en sí mismas orientaciones sexuales o identidades de género (OSIG) no normativas lo hicieron a temprana edad: mientras que la identificación de la orientación sexual se dio sobre todo durante la adolescencia (38.2%), el reconocimiento de la identidad de género tiene su momento de mayor relevancia durante la infancia (39.2%). En función de ello y consciente de los efectos negativos que ha generado la discriminación y marginación social, la senadora por Sinaloa propone reformar específicamente los artículos 19 y 58 de dicha ley, para que todas las personas puedan acceder, por la vía administrativa, al reconocimiento de su identidad de género.
“Así se atendería el derecho de las niñas, niños y adolescentes al reconocimiento de su identidad de género, pues los prejuicios sobre ello, así como las expectativas sobre los roles que han de representar las personas en la sociedad, aparecen incluso desde antes del nacimiento, mediante la proyección que sus familias hacen de dichas expectativas, por lo que desde muy temprana edad aparece una consciencia de la diferencia impuesta de roles sociales”, reflexionó la legisladora federal por Morena.
“El arraigo de prejuicios y estereotipos en la sociedad no es un hecho menor pues las personas trans enfrentan obstáculos en el acceso a sus derechos, además de que promueven su marginación en los ámbitos educativo, laboral, de seguridad social, e incluso, en la familia”, lamentó la senadora Castro Castro.
También es importante que esta población cuente con información de calidad y en forma temprana que les oriente y resuelva sus inquietudes a fin de que desarrollen su personalidad acorde con la percepción que tengan de sí mismos.
Se busca también a través de la legislación que este derecho, que ha avanzado en materia de igualdad y no discriminación hacia las personas trans, sea homogéneo en todo el país, pues solo cinco entidades federativas (Sinaloa, Morelos, Oaxaca, Jalisco y Ciudad de México) lo contemplan en su marco jurídico para personas menores de 18 años de edad.
“Tanto la disposición expresa del reconocimiento de la identidad de género por la vía administrativa, como el combate a los estigmas y la discriminación por razones de identidad de género mediante la educación, son los objetivos de la presente iniciativa”, puntualizó Imelda Castro, quien consideró además que sin estos componentes en nuestra legislación, será muy difícil desmantelar los prejuicios y erradicar la violencia.

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