Recibe mayor pensión: Lo que debes saber de la Modalidad 40 de retiro
Para garantizar una estabilidad financiera en la vejez, es bueno tener una cuenta de ahorro para el retiro. Uno de los objetivos al tener este dinero es que el trabajo realizado vaya generando un interés, es decir, que tu dinero se multiplique a lo largo de la vida laboral para poder alcanzar una pensión y poder llegar a un retiro digno.
Si te consideras una de las personas que no tienen una cantidad suficiente en tu cuenta de ahorro que te ayude a garantizar tu pensión o simplemente no sabes cómo incrementar este fondo, te presentamos esta información sobre la Modalidad 40 que comparte la revista Proteja su dinero, de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
En una entrevista que dio a Condusef, la maestra Norma Gabriela López Castañeda, directora de Incorporación y Recaudación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explica cómo funciona el modo de operación de la Modalidad 40.
Modalidad 40
Se trata de la Continuación Voluntaria del Régimen Obligatorio del Seguro Social, la cual permite que las personas trabajadoras que hayan dejado de cotizar con un patrón, continúen con aportaciones para incrementar sus semanas cotizadas y así mejorar el monto de su pensión por cesantía o vejez.
La importancia de saber que el IMSS tiene cinco ramos de aseguramiento:
- Enfermedades y maternidad
- Invalidez y vida;
- Riesgos de trabajo;
- Guarderías y prestaciones sociales;
- Retiro, cesantía en edad avanzada y vejez.
Según López Castañeda, la Modalidad 40 incluye únicamente dos de estos cinco ramos de aseguramiento, el de invalidez y vida y el de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez.
“Los beneficios de esta modalidad incluyen que estés cubierto en estos dos ramos de aseguramiento, es decir, si tienes un problema de salud, falleces o surge algún imprevisto durante el tiempo que estás contratando la Modalidad 40, tú y tus familiares estarán cubiertos, además de que vas a ahorrando para el retiro, pero eso es algo que no se conoce mucho. Se piensa que es solo para cuando se llega a la edad de jubilación, sin embargo, es bueno saber que en el camino va protegiéndote gracias al seguro de invalidez y vida”.
Origen de la Modalidad 40
La maestra Norma explicó que la Modalidad 40 nace como una respuesta a los cambios en el mercado laboral.
La especialista detalló que anteriormente, padres o incluso abuelos, cuando comenzaban a trabajar en una empresa, era común verlos continuar dentro de la misma durante toda su vida laboral, hasta llegar a la jubilación o retiro; “a esto lo conocemos como continuidad en una relación de trabajo subordinada”.
“Hoy es común ver que alguien decide emprender un negocio, o buscar nuevas formas de empleo que no necesariamente tienen que ver con una relación de subordinación”.
“El esquema de cuentas individuales para el retiro, lo que se busca es incrementar la cotización para que entonces se pueda acceder a un importe mayor para la pensión y es por ello que la Modalidad 40 te permite continuar con un esquema de aseguramiento. ¿Cómo?, pues simplemente cubriendo tus cuotas, en función del último salario que tenías registrado o de uno mayor”, dijo.
¿Cuáles son los requisitos de esta modalidad?
Para la contratación de la Modalidad 40 necesitas tener al menos 52 semanas cotizadas en el régimen obligatorio y que no hayan pasado más de 5 años de tu última cotización; entonces, se abren dos opciones: contratarla de manera retroactiva, a razón del salario que tenías registrado o superior, o simplemente, antes de que esos cinco años venzan, empiezas a cubrir de manera no retroactiva.
¿En qué casos no aplica?
“Hoy por hoy tenemos dos esquemas de jubilación: la Ley 73 y la del 97. En ambos casos te da una gran protección. En la Ley 73 puedes conservar tus derechos y además ir aumentando tu importe de pensión. En el caso de Ley 97, el mecanismo te permite fondear tu cuenta individual para asegurar un importe mayor de pensión”.
López Castañeda menciona que es común pensar que resulta lo mismo que hacer aportaciones voluntarias, sin embargo, nos explica que no es así.
“Pues en tal caso no se tiene la cobertura del seguro de retiro ni del seguro de invalidez y vida, lo cual, sin duda, hace una diferencia. Tener ambos seguros a lo largo de tu cotización te brinda protección”, señalo.
¿Quiénes pueden acceder a esta Modalidad 40?
Los requisitos para que puedas acceder a este esquema es que no estés activo laboralmente, tengas 52 semanas previas cotizando en el Seguro Social y no más de 5 años a partir del cese de tu última relación laboral.
Si cumples con esto, solo tienes que decidir el monto del salario con el que deseas cotizar; el cual depende de la capacidad de aportación de cada persona.
“El salario con el que decidas cotizar tiene que ser igual o mayor al que tenías al momento de tu última baja; el tope máximo de cotización es el equivalente a 25 UMAs… Como ejemplo de esto, si cotizas a razón de un salario mínimo, estarás pagando aproximadamente 540 pesos mensuales. En cambio, si lo haces a salario topado, tendrías que cubrir aproximadamente una mensualidad de 7 mil pesos.”, aclaró .
¿Qué sucede si se tiene más de cinco años sin cotizar?
“Con el fin de hacer frente a esa situación, se abrió la posibilidad de un programa piloto para trabajadores independientes. Donde a las personas que se registran se les otorgan los cinco ramos de aseguramiento, además de reactivar sus periodos cotizados”, dijo la Maestra Norma Gabriela López Castañeda.
Con información de Milenio