Reina Isabel II era “amada y admirada en todo el mundo”, dice Liz Truss

En una conferencia afuera de su residencia oficial en Downing Street, la ministra aseguró que Isabel II tuvo el reinado más largo en la historia de Inglaterra, y llevó estabilidad y fuerza a su país, “era el espíritu de Gran Bretaña”.

“Era una roca, una, montaña en la que Inglaterra estaba construida, su árbol creció como flores en el reinado la Gran Bretaña, es este un gran reino gracias a que ella tomó posesión después de la Segunda Guerra Mundial y alineó siete países en todo el continente”, dijo.

“Era una roca, una, montaña en la que Inglaterra estaba construida, su árbol creció como flores en el reinado la Gran Bretaña, es este un gran reino gracias a que ella tomó posesión después de la Segunda Guerra Mundial y alineó siete países en todo el continente”, dijo.

Incluso, Truss reveló que la monarca era “una inspiración personal para mí”, al igual que para muchos británicos, pues su devoción es un ejemplo para todos. Por ello, destacó que esta semana, a sus 93 años y a pesar de sus complicaciones de salud, cumplió con su deber de nombrarla como primera ministra.

“Ella ha tocado la vida de millones alrededor del mundo, en los difíciles días que vendrán nos uniremos y seremos el Reino Unido. Celebraremos su extraordinaria vida de servicio, hoy es un día de una gran pérdida, pero la reina Isabel II deja un gran legado”, agregó.

“Ella ha tocado la vida de millones alrededor del mundo, en los difíciles días que vendrán nos uniremos y seremos el Reino Unido. Celebraremos su extraordinaria vida de servicio, hoy es un día de una gran pérdida, pero la reina Isabel II deja un gran legado”, agregó.

Asimismo, reiteró su apoyo al príncipe Carlos, quien será el sucesor de Elizabeth II, para llevar a cabo la encomienda que le será designada; “ofrecemos nuestra lealtad y devoción, así como su madre se dedicó por mucho tiempo”.

“Entramos a una nueva era en la magnífica historia de nuestro país, exactamente como su majestad la hubiera deseado, diciendo las palabras: que Dios salve a la reina”, concluyó.

“Entramos a una nueva era en la magnífica historia de nuestro país, exactamente como su majestad la hubiera deseado, diciendo las palabras: que Dios salve a la reina”, concluyó.