En plenaria sin cargadas, corcholatas empatan en decibeles del aplausómetro
En plenaria sin cargadas, corcholatas empatan en decibeles del aplausómetro
Previo al encuentro en el Palacio Legislativo y a petición del coordinador del grupo parlamentario, Ignacio Mier Velazco, todos los integrantes de la bancada firmaron un “acuerdo de unidad” para no dejar que los ánimos se desbordaran y no favorecer a ninguno de los aspirantes.
El líder de la fracción informó ante el secretario de Gobernación, primer participante en la pasarela, que el acuerdo de la bancada fue ser mesurados y no mostrar una mayor preferencia o animadversión por alguno de los ponentes para evitar que esa fuera la nota en los medios de comunicación.
“Ellos, los medios, esperan la nota: a quién aplauden más, a quién le hacen vacío, etcétera. Eso no puede suceder. Les garantizo, le garantizamos, secretario, dígale al Presidente que en esta plenaria eso no va a suceder. Lo que sí va a suceder es que vamos a estar unidos”, enfatizó.
De acuerdo con un sonómetro activado por EL UNIVERSAL para medir el apoyo que recibió cada corcholata, la diferencia entre cada una de ellas fue mínima.
En el caso del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, el valor máximo que alcanzó fue de 94 decibeles, seguido de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, con 92 decibeles; el canciller Marcelo Ebrard marcó un máximo de 91 decibeles y el líder de Morena en el Senado tuvo 90 decibeles, todos al final de su respectiva participación. En el caso del diputado Gerardo Fernández Noroña no fue posible realizar el ejercicio, pues al término de la exposición de Claudia Sheinbaum pidieron a la prensa salir del auditorio y sólo se pudo seguir ese segmento por televisión.
A pesar del acuerdo de unidad, sí hubo algunas diferencias en el trato que se dio a los aspirantes, pues Ebrard fue recibido afuera de la plenaria con mariachis que le cantaron El rey y una canción que le fue compuesta para su campaña: “Marcelo, sí vamos a ganar, que lo escuchen todos, ya llegó el carnal”.
Además, un grupo de jóvenes estudiantes, que dijeron haber sido llevados a San Lázaro por el diputado Emanuel Reyes Carmona, lo ovacionaron y gritaron “¡Presidente!, ¡presidente!, ¡presidente!”, “¡se ve, se siente, Marcelo presidente!” y “¡Marcelo, amigo, los jóvenes contigo!”.
También se repartieron “Marcelitos” y “Amlitos”, muñecos de peluche con la imagen del canciller y del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Cuestionado sobre si esto no desequilibró la participación de los aspirantes, Ignacio Mier aseguró que no se violó el “acuerdo de unidad”, porque esas expresiones se dieron en el exterior y no en el interior del auditorio.
Claudia Sheinbaum tuvo el mayor poder de convocatoria, ya que fue la que más llenó el auditorio Aurora Jiménez.
De hecho, cuando inició la reunión, cerca de las 10 de la mañana, las butacas lucían semivacías y algunos asistentes comentaron que se debía a que habitualmente los diputados comienzan sus actividades laborales a las 11.
El senador Ricardo Monreal, quien por primera vez fue invitado a una plenaria de los diputados de su partido, reveló que hubo quienes le recomendaron no asistir para evitar reclamos.
Con información de Antonio López