OIEA discute con Irán por actividad nuclear similar a la fabricación armas
El organismo de control nuclear de la ONU está en conversaciones con Irán sobre el origen de las partículas de uranio enriquecido hasta el 83.7 por ciento de pureza, muy cerca del grado para la fabricación de armas, en su planta de Fordow, según un informe del organismo visto por Reuters.
La semana pasada, diplomáticos informaron que la agencia había encontrado rastros en la planta de Fordow (FFEP), donde Irán enriquece uranio hasta el 60 por ciento de pureza. El grado armamentístico es de alrededor del 90 por ciento.
Si bien pueden ocurrir picos de enriquecimiento y podría haber sido accidental, el que se reportó es relativamente grande.
Las trazas se encontraron en el producto de las dos cascadas interconectadas, o grupos, de centrifugadoras avanzadas de Fordow que enriquecen hasta el 60 por ciento.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica reprendió a Irán en un informe anterior por realizar cambios sustanciales en esas cascadas sin informarle.
“En cuanto al origen de las partículas enriquecidas por encima del 60 por ciento de U-235, identificadas tras la puesta en marcha de la nueva configuración de las cascadas en FFEP, las conversaciones con Irán continúan”, dijo el informe confidencial del OIEA a los estados miembros.
Así mismo, el informe añadió que: “Irán informó al Organismo que ‘pueden haberse producido fluctuaciones involuntarias en los niveles de enriquecimiento durante el período de transición, en el momento de la puesta en marcha del proceso de producto o mientras se sustituía el cilindro de alimentación'”.
El informe también indica que las existencias de uranio enriquecido hasta el 60 por ciento, que se produce en dos instalaciones, han aumentado 25.2 kilos a 87.5 kilos, desde el último informe trimestral.
Según la terminología del OIEA, unos 42 kilos de uranio enriquecido al 60 por ciento de pureza es una “cantidad significativa” (…) “para la que no puede excluirse la posibilidad de fabricar un artefacto explosivo nuclear”.
Sin embargo, un alto diplomático advirtió que, en la práctica, se necesitaría más de 55 kilos de uranio enriquecido al 60 por ciento para fabricar una bomba, ya que parte del material se desperdicia durante el enriquecimiento.
Irán niega haber buscado nunca armas nucleares y afirma que sólo quiere dominar la tecnología para usos civiles.
Con información de Milenio