Tesla enfrenta procesos y multas por daños al medio ambiente
La principal empresa productora de autos eléctricos a nivel mundial ha enfrentado cinco procesos judiciales y administrativos por haber causado daños al medio ambiente en Estados Unidos y Alemania, los cuales le han generado multas por más de un millón de dólares.
En los documentos oficiales, la compañía de Elon Musk reconoce que la Agencia Federal Alemana de Medio Ambiente le impuso una multa por 12 millones de euros, la cual pudo reducir a 600 mil euros. Tras la determinación, Tesla se comprometió a no impugnar.
Los reclamos hacia una empresa que se precia de tener conciencia ambiental, vienen de tiempo atrás. Ya desde 2014 medios de comunicación especializados en tecnología denunciaron que el grafito de baterías de Tesla agravó los niveles de contaminación en China y que este elemento ensucia el aire, deteriora el agua y afecta las cosechas.
Sin embargo, Tesla se defiende. En su informe de diciembre de 2022 ante la SEC, asegura que a medida que se expanden por el planeta, construyen cada nueva fábrica con diseños cada vez más eficientes y sostenibles que los anteriores, aplicando procesos respecto de la reducción de residuos, el uso de agua e incluso en la disminución de la huella de carbono en sus cadenas de suministro.
Al mismo tiempo deja claro que tendrá una política de tolerancia cero en lo que respecta al trabajo infantil, forzoso o el trato que se le da a las personas.
Tesla viene a México
Si bien el gobernador de Nuevo León, Samuel García, y otros estados que proveen autopartes, empresarios en general y el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador celebran que el norte de México se convertirá en el “centro del desarrollo mundial” con la llegada de la mega fábrica de Tesla, la empresa ha reconocido ante instancias gubernamentales en Estados Unidos que enfrenta procesos debido a irregularidades y contaminación generadas en sus plantas.
El pasado 28 de febrero el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que el fabricante de autos eléctricos eligió a Monterrey, capital de Nuevo León, para instalar su primera planta en México, hecho que generará inversión y empleo.
Además contó que fue a través de una llamada que sostuvo con el magnate Elon Musk, que lo convenció de instalar su planta automotriz en el país. Sin embargo, una de las condiciones que puso el gobierno mexicano fue que Tesla deberá utilizar, en todo el proceso de fabricación de los automóviles eléctricos, agua reciclada.
Al hacerse oficial el anuncio de que la Gigafactory, como la llamó Musk, se instalaría en el municipio de Santa Catarina, el gobernador Samuel García se mostró tan emocionado que aseguró que cuando tenga un hijo varón lo nombrará Samu Elon García Rodríguez, al que “la raza local” podría decirle El Samuelón.
El mandatario regio agregó, más en serio, que gracias a esa planta “pronto seremos el centro del desarrollo mundial y un hub de innovación tecnológica que estará a la vanguardia de la industria verde”.
Sin embargo, ante la SEC, el instrumento de vigilancia gubernamental y quien mantiene la integridad de los mercados de valores, Telsa reveló que ha enfrentado cinco procesos antes diversas instancias debido a problemas de contaminación y malas prácticas.
Contaminación de aire y mal manejo de residuos
“Cada uno de los asuntos a continuación se divulgan porque están relacionados con regulaciones ambientales y sanciones civiles agregadas que actualmente creemos que podrían exceder el millón de dólares. Creemos que cualquier procedimiento que sea importante para nuestro negocio o situación financiera probablemente tenga sanciones potenciales muy superiores a dicho monto”, reconoció la empresa de Elon Musk, nacido en Sudáfrica y que además tiene nacionalidad estadunidense y canadiense.
En sus informes anuales ante la SEC, Tesla informó que uno de los problemas que enfrentaban ese año era el de la planta en Fremont, ubicada cerca de San Francisco, California. Funcionarios del Distrito de Gestión de la Calidad del Aire del Área de la Bahía, que depende de la Agencia de Protección al Medioambiente (EPA, como se le conoce en inglés), advirtieron que las emisiones de la fábrica superaban los límites permitidos.
Entre las irregularidades se encontraban la instalación o modificación de equipos sin los permisos adecuados, la falta de realización de las pruebas de emisiones y de mantenimiento, además de no reportar información al Distrito de Gestión de Aire de manera oportuna.
En 2020, la empresa recibió una notificación por parte de la EPA para revisar el cumpliento de las operaciones de la fábrica de Fremont. Finalmente, en 2021, acordaron pagar una multa de un millón de dólares por las faltas ocurridas en California.
Mientras, en su informe del 2021 ante la SEC, la empresa informó que los Fiscales de Distrito en varios condados de California realizaban investigaciones sobre las prácticas de separación de desechos de Tesla.
Ese año la compañía aseguró a sus inversionistas que había implementado varias medidas correctivas, incluida la realización de capacitaciones y auditorías y mejoras en los programas de gestión de desechos de su sitio. Es decir, reconocía que algo no estaba bien y que había que mejorar.
“Si bien el resultado de este asunto no se puede determinar en este momento, actualmente no se espera que tenga un impacto adverso significativo en nuestro negocio”, decía la información corporativa. Sin embargo, Elon Musk hacía declaraciones en las cuales dejaba claro que California tenía “regulaciones excesivas, litigios excesivos, impuestos excesivos”.
A la par de esos dichos acerca de los litigios, para abril del 2021 Tesla recibió un aviso de la Agencia de Protección al Medioambiente en donde se sostenía que la compañía no proporcionó registros que demostraran el cumplimiento de ciertos requisitos según los estándares nacionales de emisión para contaminantes atmosféricos.
Litigio en Alemania
En 2022 la empresa reconoció ante la SEC que existía desde años atrás un litigio con la Agencia Federal Alemana del Medioambiente, por no cumplir con las normas germanas de reciclaje de las baterías de sus vehículos.
Se emitió una multa a su subsidiaria por 12 millones de euros, sin embargo, los abogados de la empresa presentaron objeciones y hasta diciembre del 2022, Tesla aseguró ante la SEC que había logrado reducir la multa a 600 mil euros y no pretendía inconformarse.
También en 2022 la firma confirmó que existía la investigación por parte de los Fiscales del Distrito de California, para indagar cómo se maneja la separación de residuos en las plantas de automóviles. No ofrecía mayores detalles de este proceso, actualmente en curso.
Entre los compromisos de Tesla, llama la atención su determinación por impulsar una política de tolerancia cero frente al trabajo infantil, forzoso o el trato que se le da a las personas.
Esto es relevante sobre todo porque desde años atrás hay decenas de acusaciones de hechos relacionados con acoso sexual o discriminación hacia y entre trabajadoras y empleados. Se han hecho públicas demandas –pero los arbitrajes han sido privados–, algunas de las cuales se originaron en la planta californiana de Fremont.
Estos antecedentes podrían arrojar luz sobre cómo serán las condiciones para contratar empleados en la “Mega México”, la planta neoleonesa en Santa Catarina.
Con información de Milenio