Sin debates, habrá candidatura presidencial de Morena en septiembre: AMLO impone método y tiempos en su partido
El Consejo Nacional de Morena aprobó ayer, sin objeción, las reglas para elegir a quien encabece la candidatura presidencial, mismas que el presidente Andrés Manuel López Obrador había planteado seis días antes, durante una cena con los gobernadores morenistas y los aspirantes Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Ricardo Monreal y Claudia Sheinbaum.
Una vez que estos cuatro aspirantes se integraron al consejo la tarde de este domingo, los casi 400 consejeros morenistas votaron las reglas de la contienda interna sin debate, porque los acuerdos estaban prácticamente planchados previo a la sesión, que apenas duró hora y media.
Tal como lo había pedido el presidente, los aspirantes deberán renunciar a sus cargos; la elección se realizará a través de cinco encuestas y los perdedores ocuparán cargos dentro del próximo gobierno y en el Legislativo. No habrá debates y los aspirantes no podrán participar en “medios reaccionarios, conservadores, adversarios de la cuarta transformación”.
Entre el 12 y 16 de junio será el registro de aspirantes a ser “Coordinador de Defensa de la Transformación”. Del 19 de junio al 27 de agosto, los aspirantes realizarán recorridos por el país y el levantamiento de la encuesta será del 28 de agosto al 3 de septiembre. Finalmente, el 6 de septiembre se dará a conocer el nombre del ganador o ganadora.
Algunas de estas reglas fueron impulsadas por Ebrard desde diciembre pasado, para buscar “piso parejo” y “equidad”, sobre todo ante la jefa de gobierno, Claudia Sheinbuam; sin embargo, hasta ahora no había sido tomado en cuenta por la dirigencia de Morena.
Solo fue escuchado después del resultado de la elección de Coahuila, donde Morena perdió la gubernatura frente al PRI, luego de que Ricardo Mejía, al no ser elegido candidato de Morena, abanderó al PT y criticó permanentemente al morenista Armando Guadiana.
Desde entonces, el discurso morenista ha sido enfocado a la “unidad” y a que el abanderado de 2024 será elegido en un proceso “fraterno”, sin fracturas y cuyo resultado será inapelable.
Por eso es que el pasado lunes 5 de junio, previo a la cena entre el presidente con los aspirantes y gobernadores, el mandatario recibió a Ebrard en Palacio Nacional para escuchar sus propuestas para las reglas del proceso interno. Una de ellas era que todos los aspirantes renunciaran a sus cargos para contender internamente.
Dicha propuesta impediría, por ejemplo, que la jefa de gobierno llegara a su Quinto Informe de Gobierno en octubre y la publicidad que ello conlleva, o que el secretario de Gobernación realice visitas en los estados, como ha hecho en su calidad de encargado de política interna. Ebrard, en cambio, fue el primero en anunciar su renuncia, lo que metió presión al resto de contendientes antes del consejo.
Otro tema impulsado por Ebrard había sido que la encuesta solo tuviera una pregunta, pero no será así, y el diseño de la misma estará a cargo de la Comisión de Encuestas de Morena.
Tampoco habrá debates entre los aspirantes, como lo había propuesto, pero Ebrard sí logró que se prohibieran los apoyos de gobernadores, alcaldes y funcionarios durante la contienda, luego de que este sábado siete gobernadores expresaron su respaldo a Sheinbaum a través de sus redes sociales. Ebrard aseguró: “Eso lo hacía el PRI hace mucho, nosotros ya no tenemos por qué hacer eso”.
La pasarela y las porras
Más tardó la pasarela de los aspirantes que la votación —por unanimidad, según dijo el dirigente de Morena, Mario Delgado— sobre las reglas para elegir a la persona candidata.
Ricardo Monreal, Adán Augusto López, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard llegaron —en ese orden— a un hotel de la CDMX, donde el Consejo Nacional de Morena celebraría una sesión extraordinaria para definir los lineamientos.
Cada aspirante puso un toque personal a su llegada. Monreal, por ejemplo, lo hizo en compañía de unas 50 personas que con todo y batucada lo escoltaron hasta el hotel.
“¡De aquí pa’ llá, todos con Monreal!”, coreaban los presentes mientras el senador afirmaba que él iba por la unidad esperando los resultados que se dieran.
Sobre la posible realización de debates entre los aspirantes, Monreal descartó esa posibilidad, pues recordó que en la cena que tuvieron con el presidente Andrés Manuel López Obrador se acordó que se celebren asambleas informativas y campañas austeras. Un acuerdo que desde el lunes estaba claro entre los aspirantes, por lo que el Consejo Nacional terminó siendo un mero trámite.
Otro que llegó caminando fue el secretario de Gobernación. Él no llevaba porra, pero se bajó de su vehículo cuadras antes de llegar al cónclave.
Respecto del apoyo que externaron algunos gobernadores en favor de la jefa de gobierno, el funcionario cuestionó: “¿Cuántos gobernadores?, ¿de cuántos?”, pues recordó que Morena gobernará 23 de las 32 entidades del país y solo siete gobernadores escribieron mensajes de apoyo a Sheinbaum, mismos que, tras el “regaño” del presidente López Obrador, fueron eliminados de sus redes sociales.
La jefa de gobierno arribó minutos después de las 14:00 horas, cuando el Consejo Nacional estaba convocado.
Evitó pronunciarse, solo repitió el mismo discurso de los demás aspirantes: unidad.
Reiteró que este lunes dará un mensaje en el que fijará su posición respecto de los acuerdos del Consejo Nacional, así como sobre su inminente solicitud de licencia.
Afuera del hotel, se congregó un grupo de simpatizantes de Ebrard, quienes al arribo del Sheinbaum corearon sin parar “¡Piso parejo! ¡Piso parejo!”, lo que hizo que la jefa de gobierno se volteara hacía ellos y les dijera: “Hay piso parejo”.
El último en llegar, pues regresaba a la CDMX después de tener un encuentro en Chiapas con el hermano del presidente, Pío López Obrador, fue Ebrard.
Sus simpatizantes lo recibieron bajo el grito de “¡Presidente! ¡presidente!”, mientras que él, a pesar del retraso con el que llegó, se tomó cinco minutos para hablar con las decenas de periodistas que buscaban una declaración.
Insistió en las propuestas para lograr equidad en la contienda interna de Morena. Dijo que la separación del cargo de los otros contendientes es indispensable “porque de otra manera hay inequidad de entrada; eso nos permitirá en estos dos meses estar en condiciones iguales, lo que importa es la persona, no el cargo”.
Al cónclave morenista también asistieron, en calidad de invitados especiales, los aspirantes Manuel Velasco, del Partido Verde, y Gerardo Fernández Noroña, del PT.
“Yo haría un llamado a todos los que van a participar para ser representantes del movimiento, yo lo más importante es que se mantenga la unidad, que la mujer o el hombre que salga electo salga apoyado por todos, que no haya divisiones y que entendamos que la lucha no es entre nosotros”, sostuvo Velasco.
Al concluir el consejo, Ebrard se dijo “contento” por los acuerdos logrados, pues permitirán “una competencia real”; mientras, Fernández Noroña escribió en su cuenta de Twitter que llegó solo al Consejo porque “me pidieron que fuera solo. Ni siquiera una persona permitieron que me acompañara”. En tanto, Sheinbaum y Adán Augusto no dieron declaraciones al finalizar el encuentro.
Pues claro, me pidieron que fuera solo. Ni siquiera una persona permitieron que me acompañara. https://t.co/oPAyk0uWoe
— Fernández Noroña (@fernandeznorona) June 12, 2023
Los acuerdos
- No habrá la posibilidad de debates. Tiene que ser una contienda fraterna y no puede haber denostación entre compañeros, tiene que haber absoluto respeto y tampoco pueden hablar mal o desacreditar este proceso, porque tiene todo el consenso del Consejo Nacional.
- Se abstendrán de participar o promover cualquier acto o expresión de desprestigio, descalificación o agresión hacia sus competidores o competidoras y alentar a sus simpatizantes y adherentes a no incurrir en el ataque y la calumnia en contra de los otros participantes.
- Las asambleas informativas deben desarrollarse de manera austera, sin derroche de gastos publicitarios ni propagandísticos, rechazando toda práctica antidemocrática.
- Para garantizar certidumbre en la encuesta, se llevarán a cabo cuatro encuestas espejo a partir de las empresas propuestas por los aspirantes, las cuales serán seleccionadas por sorteo. En el levantamiento habrá representantes de cada uno de los aspirantes, un coordinador designado por la Comisión de Encuestas y un encuestador; asimismo, estarán foliadas y se llevarán a cabo con el esquema de urna simulada.
- Cada aspirante podrá proponer dos empresas encuestadoras, siempre y cuando no hayan presentado resultados distantes a los oficiales en ejercicios electorales anteriores. De estas propuestas, cuatro encuestadoras serán elegidas por sorteo y la quinta será la Comisión de Encuestas, la cual será la encargada de redactar el cuestionario y determinar el tamaño de la muestra.
- Deberán limitarse de expresar cualquier opinión en favor de alguno de los aspirantes: el presidente de la República y los titulares de su gabinete legal y ampliado; los gobernadores y los integrantes de sus respectivos gabinetes; alcaldes y presidentes municipales y sus colaboradores de primer nivel; los coordinadores de las bancadas de Morena en el Congreso y los cargos de dirigencia nacional o estatal en Morena, y los integrantes de las comisiones de Elecciones y Encuestas.
- Podrán iniciar sus recorridos por el país a partir del 19 de junio y suspenderlos a más tardar el domingo 27 de agosto. Del 28 de agosto al 3 de septiembre será el levantamiento de la encuesta. Del 4 al 6 de septiembre se procesa la información. El 6 de septiembre se darán a conocer los resultados en un acto público.
- A quienes hayan quedado en el segundo y tercer lugar de la encuesta se les permita escoger entre una invitación a ocupar una posición entre la gestión pública o ser propuestos para la coordinación de Morena en defensa del federalismo o la representación popular.
- Se abstendrán de establecer “alianzas inconfesables” con grupos de interés y de hacer cualquier clase de compromiso con sectores de la reacción oligárquica, organizaciones empresariales o gobiernos extranjeros.
- Evitarán participar en medios reaccionarios, conservadores, adversarios de la “cuarta transformación”, partidarios del viejo régimen.
- Rechazarán el uso de cualquier recurso de procedencia presupuestal, empresarial o de actividades presuntamente ilícitas para llevar a cabo sus actividades de organización.
Con información de Animal Político