La Espinita

Andy S. K. Brown

  • Amílcar Olán & Aldo Díaz, SA
  • Alpízar: ¿Cuentas en Suiza?
  • Órale, Jorge, ¡no Máynez!

 

Encontrar socios o “padrinos” que ya llevan años recorriendo el camino de las transas con la supuesta venta de computadoras que no entregó a las oficinas gubernamentales… con la intermediación en las licitaciones de medicamentos en el sector público, particularmente en el IMSS donde le compran hasta en el doble de precio… con el desarrollo de clubes de golf –en presunta complicidad con criminales–… con “bisnes” en Segalmex… entre otros muchos fraudes y robos, es un verdadero regalo del Cielo.

Amílcar Olán, el socio y/o prestanombres de los hijos de AMLO, mi tocayo Andy y su hermano menor Bobby López, halló en Aldo Díaz Pérez –a quien se describe en el párrafo anterior– una bendición. Topó a quien lo lleva de la mano en la adquisición fraudulenta de medicamentos, como se ha dado a conocer en días recientes.

Cuentan para ello no sólo con el Vo. Bo. de Zoé Robledo –quien seguro se lleva su “moche”–, sobre todo con Humberto Pedrero, ex tesorero del escasamente transparente niñato verde Manuelito Velasco, cuando él y su mamá dizque gobernaban a Chiapas, y con Javier Guerrero, recomendado por Santiago Creel, quien maneja a su gu$to a los delegados.

Aldo Díaz Pérez volvió a saltar a la palestra ahora que se ha dado a conocer que Fernando Bilbao también ha incursionado en el terreno de los energéticos y que, para no variar, ha recibido millones y millones de pesos en contratos otorgados por la SENER, cuando la cuestionada zacatecana Rocío Nahle era su titular.

Bilbao contraerá nupcias en unos días más con una hija de la aspirante de Morena al gobierno de Veracruz. Y ya le dieron su dote millonaria.

¿Será que Díaz Pérez es una especie de Midas?

¿Que a todos quienes hacen tratos con él les enseña el camino a seguir? ¿El camino de la corrupción?

Tiene alumnos y distinguidos, entonces.

Y claro, socios en los diferentes gobiernos.

* * *

Hace un par de semanas, Carlos Antonio Alpízar Salazar paseaba a bordo de un BMW por calles y carreteras suizas,

Se le veía feliz, pese a que en México se le acusa de haber actuado como sicario del exministro Arturo Zaldívar, presionando a jueces y magistrados para que sus fallos favorecieran los ilegales caprichos de López Obrador y, en el caso de no hacerlo, castigándolos con suspensiones y acusaciones falsas.

¿Qué hacía rolando por los cantones suizos el exsecretario técnico de la presidencia del Consejo de la Judicatura Federal, que, por la gracia del dios AMLO, ahora despacha como titular de la Unidad de Desarrollo Democrático en la SEGOB?

¿Fue a depositar una lanita en alguna de las prestigiadas instituciones financieras de la Confederación Helvética?

¿A retirar a algunos francos suizos para pagar a sus defensores, ante la investigación que ya le ha enderezado la propia Judicatura?

¿O nada más a llevar a su hija a un colegio fifí, para que internada, no se percate de las broncas en las que anda metido su padre?

Y finalmente, ¿ya le dieron vacaciones en Gobernación donde tiene menos de seis meses de cobrar dinero de los pagaimpuestos?

* * *

La ingesta excesiva de cervezas hace daño.

No sólo hace perder la razón, incluso provoca alucinaciones.

¿Será eso lo que le sucede al candidato relevista de Movimiento Ciudadano?

Porque a cada rato dice que ya rebasó a Xóchitl Gálvez.

Y en una de esas no sale con que ya está a un par de puntos de alcanzar a Claudia Sheinbaum quien, de acuerdo con las encuestas a modo, ya lleva 898 puntos de ventaja.

Y no ceja en demandar que sea la principal oposicionista quien renuncie a su favor.

Que hasta se compromete a formar un gobierno de coalición.

¡Ay, Jorge! ¡No Máynez!

Guarda las “chelas” para después, cuando llores tu derrota.

* * *

Es seguro que, si le llegaran a preguntar a la “ticher” Leticia Ramírez si de verdad ella llamó telefónicamente para que los maestros de la CNTE se mantuvieran en plantón en el Zócalo, ella respondería:

“Esa pregunta no se la puedo contestar”, como ya dijo cuando recién sustituyó a Delfina Gómez en la titularidad de la SEP.

Pedro Hernández, que así se llama quien la delató –también a Luisa María Alcalde– coordina a sólo una mínima pate de la Sección 9, la que está adscrita a la CNTE.

A final de cuentas, fracasaron en su intentona de detener a la incontenible Marea Rosa, como quería el medroso López Obrador.

@AndySKBrown1

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