Donald Trump hizo ‘estallar’ de coraje y blasfemar al rey Carlos III
El rey Carlos y William, príncipe de Gales, estallaron en una diatriba furiosa cuando Donald Trump se burló de Kate Middleton, princesa de Gales, por aparecer en fotografías topless durante un viaje en la playa en 2012.
Este es uno de los pasajes que se revelarán en la próxima biografía de Christopher Andersen, ‘El Rey: La vida de Carlos III‘, de acuerdo con un adelanto editorial publicado por el Daily Mail.
La anécdota precisa que los comentarios de Trump también resultaron en “torrentes de blasfemias” de Carlos y William, así como del príncipe Harry.
Es que el ahora expresidente de Estados Unidos tuiteó en ese entonces que Middleton tenía la culpa de haber sido captada por fotógrafos semidesnuda en Provenza, Francia, en 2012.
“Kate Middleton es genial, pero no debería estar tomando el sol desnuda, solo ella tiene la culpa… ¿Quién no lo haría?”, dijo Trump.
En ese momento St. James’ Palace emitió un comunicado calificándo la publicación de las fotografías en una revista francesa como una invasión “grotesca” de la privacidad y diciendo: “sus altezas reales tenían todas las expectativas de privacidad en la casa remota. Es impensable que alguien deba tomar tales fotografías, y mucho menos publicarlas”, agregó.
Según los informes, el libro de Christopher Andersen agrega que el rey Carlos quedó “decepcionado” cuando Trump se refirió a él como el “príncipe de las ballenas”, y denostó al estadounidense cuando afirmó que pudo haberse acostado con la princesa Diana si hubiera querido.
El libro también dice que la familia real trató de “desalentar” una visita planificada de Trump al Reino Unido en 2017, y se dice que Carlos, William y Harry intentaron detenerlo.
De acuerdo con el biógrafo, “Carlos, William y Harry ‘quemaron’ las líneas telefónicas entre Clarence House y el Palacio de Kensington y los tres Príncipes acordaron trabajar entre bastidores para desalentar la visita de Donald Trump.
“A lo largo de 2017 y hasta 2018, los británicos parecían casi tan fascinados con la tormenta de tuits de Trump como sus primos estadounidenses. La familia real no fue la excepción. En cada oportunidad, incluida la recepción de la boda del príncipe Harry, Carlos llevó a un lado a sus amigos estadounidenses ricos e influyentes y los instó amablemente a obtener información”.
Con información de Aristegui Noticias
