Dra. Edith López Garnica…El poder de dar una nueva vida en sus manos
Oswaldo Villaseñor
Realizar trasplantes de hígado y páncreas, profesión por muchos años dominada por hombres, ha llevado a la doctora cirujana Dolores Edith López Garnica, originaria de Culiacán, a ser una de las mujeres que conforman el selecto grupo de las 100 mujeres más poderosos en los negocios en México de acuerdo a la prestigiada revista Expansión.
Dolores Edith López Garnica es profesora de Pregrado y Postgrado en la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud del Tecnológico de Monterrey y forma parte del equipo de Trasplante y Cirugía Hepatobiliopancreatica del TecSalud.
La doctora Edith López Garnica es hija del licenciado José Luis López Duarte y de la señora Patricia Garnica.
No fue nada fácil abrirse espacio en una especialidad médica considerada como ruda y principalmente acaparada por hombres, expresó la doctora López Garnica.
Comentó que al terminar su carrera de medicina en el Tec de Monterrey, decidió ir a estudiar una especialidad en cirugía Laparascópica al estado de Texas en Estados Unidos.
Luego decidió ir a España a estudiar una especialidad en transplante de Hígado y páncreas.
Regresó a Monterrey para incorporarse al equipo de líderes de transplantes del Hospital Zambrano del Tecnológico de Monterrey.
Desde su papel como profesora de la facultad de medicina, dice, promueve la inclusión a través de grupos de apoyo a las jóvenes estudiantes para que vean que no hay más límites que sus propios sueños.
Aquí la entrevista realizada por la revista Expansión.
CAMBIAR VIDAS A TRAVÉS DEL COMPROMISO CON LA INNOVACIÓN
Para Dolores, el hígado es un órgano fascinante, cuyas múltiples funciones tienen un gran impacto en otros sistemas del cuerpo.
Así despertó su interés por especializarse en este campo, como egresada del Programa de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud y del Programa de Cirugía General del Tecnológico de Monterrey.
En su opinión, el mayor reto ha sido representar al talento femenino en el ámbito de la salud, al continuar con el legado de las profesionales que han alzado la voz para ganar visibilidad. Gracias a sus esfuerzos, cada vez más mujeres tienen la oportunidad de demostrar sus ca-pacidades, para guiar y acompañar a las nuevas generaciones.
La medicina requiere mucho esfuerzo, pero posteriormente se ve reflejado cuando logramos dar atención de calidad a nuestros pacientes”. Dice.
