Mexicanos Primero Sinaloa advierte que, aunque existen avances relevantes, persisten retrocesos críticos en inclusión, formación docente, primera infancia e infraestructura escolar. Aunque el Presupuesto Educativo 2026 por más de 37 mil millones de pesos aprobado por el Congreso del Estado incorpora algunos avances, también registra retrocesos que impiden garantizar el derecho a aprender de niñas, niños y jóvenes en Sinaloa, advirtió Nuria González Elizalde. En conferencia de prensa, la directora general de Mexicanos Primero Sinaloa expuso que el debate no puede reducirse a si el presupuesto crece o no, sino a si ese crecimiento responde a las necesidades reales del aprendizaje. “El presupuesto es el principal mecanismo para garantizar el derecho a aprender. No basta con que haya más dinero: importa en qué se invierte, a quién prioriza y qué problemas busca resolver”, subrayó. Cuando se decide bien en educación, todo el estado gana —indicó—, pero un peso mal asignado es una oportunidad perdida para una niña, un niño o un joven. Aumenta el gasto educativo, pero no resuelve los problemas de fondo En el análisis realizado en Mexicanos Primero Sinaloa sobre la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos 2026 se identificó lo siguiente: el gasto público total en Sinaloa será de 78,344,023,814 pesos, lo que implica un aumento real (ajustado a la inflación) de 8.1%. Para el sector educativo, el presupuesto asignado es de 37,195,375,982 pesos, lo que representa 47.5% del total, y un aumento de 2.8% real con respecto al año anterior, lo cual es positivo dado el contexto de violencia que enfrenta la entidad.

La organización reconoció este crecimiento, pero subrayó que “más recursos no garantizan avances”, sobre todo cuando persisten reducciones en áreas clave para impulsar la inclusión y mejorar las condiciones de aprendizaje. El 28 de noviembre, MPS entregó al Congreso un análisis técnico, con propuestas y datos para mejorar la asignación de recursos. Pese a ello, el presupuesto fue aprobado el 9 de diciembre sin una deliberación técnica previa con organizaciones especializadas. “Nuestra postura no es de confrontación; es de apertura al diálogo y dar espacio para la claridad”, aclaró González Elizalde. Avances que importan… y retrocesos que pesan El análisis de Mexicanos Primero Sinaloa se concentró en cuatro dimensiones clave: equidad e inclusión, desarrollo profesional docente, primera infancia e infraestructura escolar. Cada una refleja avances importantes, aunque también retrocesos que limitan el alcance y la eficacia de los recursos. 1. Equidad e inclusión: un acierto estratégico y dos retrocesos preocupantes El aumento de 24.8% al Telebachillerato Comunitario es un avance relevante, ya que amplía la oferta educativa para jóvenes de comunidades con acceso limitado a media superior y les permite fortalecer sus trayectorias escolares. Sin embargo, los recortes de –36.2% al Programa Fortalecimiento de los Servicios de Educación Especial y –3.4% al apoyo a migrantes, implican una menor capacidad de respuesta para una población que ya enfrenta barreras para permanecer y aprender en la escuela. “No buscamos la excelencia excluyente, sino el aprendizaje incluyente”, subrayó la directora general de MPS. 2. Desarrollo profesional docente: mejor formación inicial, menor apoyo al magisterio en servicio Los incrementos a las escuelas normales y a la UPES fortalecen la formación inicial docente. No obstante, el recorte de –4.6% al Programa para el Desarrollo Profesional Docente (PRODEP) reduce la actualización continua y el acompañamiento pedagógico, indispensables para mejorar la enseñanza y el aprendizaje en el aula, así como para la revalorización del magisterio.

3. Primera infancia: se sostienen servicios, pero se detiene la expansión Aunque aumentan las partidas para guarderías y los Centros de Atención Infantil, el recorte de –2.8% al Programa de Expansión de la Educación Inicial reduce la capacidad institucional para ampliar y sostener servicios integrales de protección y desarrollo infantil. “Invertir en los primeros años de vida es una de las inversiones más trascendentales que existen. Si no hay un desarrollo integral en la primera infancia, las desigualdades se instalan desde el origen”, explicó Nuria González. 4. Infraestructura educativa: más inversión básica, menos condiciones para operar El incremento de 27.1% en infraestructura educativa básica abre una oportunidad para atender planteles que requieren mantenimiento y rehabilitación; sin embargo, los recortes en media superior y superior, en el Instituto Sinaloense de Infraestructura Física Educativa (ISIFE) y en el componente de mejora de escuelas y aires acondicionados, limitan el alcance de este avance. “Sin escuelas seguras, dignas y funcionales, difícilmente se alcanzarán mejores niveles de aprendizaje. No es lujo, es condición mínima”, señaló. Un presupuesto que no garantiza plenamente el derecho a aprender En su análisis, Mexicanos Primero Sinaloa subrayó que mientras el Presupuesto 2026 avanza en telebachillerato, formación inicial docente e infraestructura básica, retrocede en áreas indispensables para fortalecer la inclusión, la continuidad y la calidad educativa. El resultado es un presupuesto que aún no logra asegurar el derecho a aprender para todas y todos. MPS lanzó un llamado respetuoso al Congreso y al Gobierno del Estado en el que los exhorta a: 1. Invertir en lo importante, no en lo políticamente cómodo. 2. Construir el Presupuesto Educativo 2027 desde el inicio con evidencia, participación y diagnóstico honesto. 3. Abrir espacios de trabajo técnico y colaborativo. 4. Corregir los retrocesos que afectan a quienes más lo necesitan. Mexicanos Primero Sinaloa enfatizó que garantizar el derecho a aprender no es una aspiración: es una obligación constitucional y moral.

 

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