El Presidente 2006-2012 siempre supo quién era García Luna, según nuevos testimonios
Mandos policiales, diplomáticos, funcionarios y hasta la Iglesia Católica advirtieron a Felipe Calderón, cuando era Presidente de México, sobre los nexos que tenía su Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, con el crimen organizado, acusación que ahora está en manos de la Fiscalía de Estados Unidos, que lo señala de haberse relacionado y haber trabajado con el Cártel de Sinaloa.
Ciudad de México, 23 de enero.- Fueron varias y de distintos sectores las advertencias que se hicieron a Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) sobre los posibles nexos que tenía Genaro García Luna con la delincuencia organizada. Mandos policiales, funcionarios del gobierno e incluso la Iglesia Católica alertaron al entonces Presidente sobre las presuntas actividades ilícitas de su “Súper Policía”, pero nada sucedió. Ahora su Secretario de Seguridad enfrenta un proceso en Estados Unidos por sus supuestos vínculos con el Cártel de Sinaloa.
Estos testimonios que prendieron alertas sobre García Luna ahora aseguran que Calderón Hinojosa sí tenía conocimiento de las actividades ilícitas que realizaba su brazo derecho en materia de seguridad. Para algunos de los funcionarios del propio Gobierno del panista, como Javier Herrera Valles excoordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal Preventiva y al General en retiro Tomás Tomás Ángeles Dauahare, el alzar la voz les valió ser perseguidos políticos por los señalamientos que hicieron en contra del ejecutor de la guerra contra el crimen organizado.
Genaro García Luna irá a juicio. No hay marcha atrás. El jurado que definirá el futuro del “Súper Policía” de Felipe Calderón ya quedó conformado. Siete mujeres y cinco hombres fueron elegidos de entre al menos 400 aspirantes.
La lista de testigos también quedó en parte revelada. Capos e integrantes de la delincuencia organizada, como Sergio Villarreal Barragán, “El Grande”, Miguel Ángel Arriola Márquez, Jesús “El Rey” Zambada García, y exfuncionarios corruptos, como el exfiscal de Nayarit, Edgar Veytia y Francisco Cañedo Zavaleta, ex agente Federal de Investigación (AFI), vinculado con el cártel de los Beltrán Leyva, están entre la lista de testigos clave que presentará la Fiscalía de Brooklyn.
El juicio es trascendental al tratarse del funcionario mexicano de más alto rango juzgado por crimen organizado, pero además porque ha levantado altas expectativas. Se espera que las declaraciones de los testigos clave den luz al nivel de corrupción que existió durante la administración del expresidente Felipe Calderón y, sobre todo, si existen testimonios que relacionen directamente al exmandatario o confirmen si al menos tenía conocimiento de las conexiones y relación que tenía García Luna con la delincuencia organizada.
Felipe Calderón Hinojosa —quien hasta el momento ha guardado silencio desde que arrancó el juicio con el proceso de selección del jurado— ha dicho que no tenía conocimiento de estos presuntos nexos. Sin embargo, son múltiples los testimonios que muestran que el expresidente fue avisado sobre lo que sucedía.
“Señor Presidente, lo más preocupante para la Seguridad Pública de nuestro país es que el Ing. García Luna continúa sin dirección en la Policía, mintiéndole a usted y a la sociedad haciéndole creer en una coordinación entre PFP y AFI que no existe, siendo ampliamente comentado por los diferentes medios de comunicación”, escribió Javier Herrera en una carta enviada a Felipe Calderón el 15 de febrero de 2008.
Desde diciembre de 2019, cuando García Luna fue arrestado en Estados Unidos, se dio a conocer que el exmando policial había enviado a Calderón dos misivas, durante el Gobierno del expresidente, donde narraba diversas anomalías.
El excoordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal Preventiva indicó, en una entrevista realizada el pasado 18 de enero con Los Periodistas, Álvaro Delgado y Alejandro Páez, que decidió mandar las cartas para denunciar el actuar de García Luna y para que el Jefe del Ejecutivo pusiera atención en lo que sucedía dentro del contexto de la guerra contra la delincuencia organizada, pues creía que el mandatario había sido engañado por su secretario.
“Ingenuamente pensé que Genaro García Luna tenía engañado al Presidente Felipe Calderón, yo pensaba que era una persona honesta que tenía la voluntad de investigar a su hombre de confianza. En su gabinete sabían que Genaro García Luna era el consentido y que lo tenía totalmente deslumbrado por sus capacidades que tenía para espiar a la gente”, recordó Herrera.
Insistió en que él envió esas misivas, sin tener conocimiento de que el expresidente y Genaro García Luna eran quienes “administraban el secuestro y promovían el narcotráfico en México desde la AFI”.
“Mi sorpresa fue que sí tenía conocimiento el Presidente y que realmente se tomó como un agravio a su hijito haberlo dicho lo que ya no era un secreto para él, era una sociedad la que tenían, entonces yo sufrí las consecuencias”.
El exmando policial detalló que la denuncia le generó una intensa persecución en su contra: “Cuando yo le mando la primera carta no pasa nada. Cuando le mando la segunda, ahora sí con copias a (Eduardo) Medina Mora, entregué documento con evidencias y no hubo nada, nunca se me llamó a declarar; al contrario, me fincaron responsabilidades que no tenía, me acusaron de delincuencia organizada y estuve cuatro años en prisión por esa situación”.