Superó las 18 unidades. Analistas advierten que hay un cambio de tendencia en lo que va de octubre ante un ajuste en los portafolios. El factor Fed.

Las señales de que el banco central estadounidense pueda volver a subir la tasa de interés han puesto en jaque al peso mexicano, que en lo que va de octubre ya acumula una pérdida de casi 5% y este jueves arrancó superando la barrera de las 18 unidades por dólar.

Tan solo esta jornada, la divisa mexicana llegó a alcanzar una depreciación de casi 2%, tocando niveles de 18.30 pesos por dólar, extendiendo las pérdidas que se registran a lo largo de esta semana, en la que acumula ya una pérdida de 4.8%.

 

“Estamos observando esta semana un cambio de tendencia”, explicó en diálogo con LPO el estratega Marco Oviedo, del banco de inversión XP. Detalló que este cambio tiene que ver con el apretamiento de la postura monetaria en Estados Unidos y un rebalanceo en los portafolios de los players del mercado, buscando menor exposición al riesgo.

 

Vale decir que, esta mañana, los precios del crudo también extendieron sus pérdidas ante el temor de un debilitamiento de la demanda, con la desaceleración en Europa y China y la expectativa de que ocurra lo mismo en Estados Unidos.

 

“Ahora los mercados están pendientes a que se materialicen mayores tasas en Estados Unidos además de algunos otros datos clave sobre la economía estadounidense”, agregó el economista.

 

La pregunta que ahora flota en el aire es si es el fin del superpeso. Analistas de Monex afirman en que serán clave las cifras macro de Estados Unidos al cierre de la semana – como la publicación de la nómina no agrícola- para entender si es una depreciación que se pueda extender, o en su caso hacer una pausa.

 

En consideración de Oviedo, será difícil revertir la tendencia una vez que se rompió el techo de las 18 unidades. “No veo un cambio o alguna variable en los siguientes días o en los siguientes dos meses que haga que el precio se regrese abajo de las 18 unidades”, señaló.

 

Consideró que tendría que pasar algo muy extraño, como que la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) cambien el tono, para que se moviera el peso. Es un escenario que descarta, al igual que el consenso del mercado, donde prevén un alza más en la tasa antes de que finalice el año y ven lejana la chance de recortes.

Algunas proyecciones, como la de Barclays, consideran que eso podría ocurrir hasta el próximo septiembre. En México, por su parte, se prevé que Banxico mantegna sin cambios la tasa en lo que resta del año. La  vicepresidenta senior de Crédito de Moody’s, Ariane Ortiz-Bollin,, aseguró la semana pasada sobre el escenario de política monetaria en México y Estados Unidos: “No hemos cruzado la puerta para bajar las tasas de interés”.

Oviedo también destacó que la debilidad que enfrenta el peso no es única de esta divisa, pues otras monedas en América Latina también están sufriendo el impacto, incluso, dijo que la mexicana sigue siendo la más fuerte, a pesar de esta depreciación.

 

En ese sentido, descartó que puedan estar impactando factores internos, como la incertidumbre de esta mañana sobre el sector aeroportuario ante el anuncio de una nueva medida tarifaria, lo que desplomó las acciones en Bolsa de los aeropuertos.

 

Con información de La Política Online

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