Los consejeros electorales del INE dieron una primera reacción a la reforma electoral aprobada en el Senado. El consejero Ciro Murayama reprobó que por primera vez en la historia del país se hayan modificados las leyes electorales sin el consenso de todos los partidos políticos, razón por la que adelantó el inicio de una batalla jurídica “para evitar la consumación autoritaria”. “Por primera vez en décadas se aprueba una reforma electoral SIN consenso. DESDE el gobierno. CONTRA la democracia. Atenta contra el respeto al voto. Desmantela al @INEMexico Inicia la batalla jurídica para evitar la consumación autoritaria. Pero hay esperanza, es ésta 👇”, escribió en redes sociales donde compartió una fotografía de la marcha en defensa del INE realizada el pasado 13 de noviembre.

De igual forma, reiteró su apoyo a los trabajadores del organismo con las acciones que decidan emprender por su cuenta la defensa de sus derechos laborales. “Compañeras y compañeros del @INEMexico Se aprobó una reforma que viola sus derechos laborales. Así se atenta también contra los derechos políticos de la ciudadanía a la que sirven. Tienen toda mi solidaridad y respaldo. Empieza la batalla jurídica para defender la democracia”, tuiteó el consejero tras la aprobación del llamado Plan B, por parte del Senado de la República.

El debilitamiento del INE, no implica su extinción

El consejero Uuc-kib Espadas expuso que si bien la reforma electoral aprobada en el Senado de la República atenta contra la institucionalidad del INE y busca debilitarlo, “no estamos muertos”. Coincidió con Murayama en el sentido de que recurrirán a las instancias jurídicas para echar atrás estos retrocesos electorales y democráticos, vía una controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

“El resultado global de esta reforma será el debilitamiento de la estructura territorial del Instituto”, acotó en entrevista con Óscar Mario Beteta, en Radio Fórmula. Espadas Ancona comentó que el INE cuenta con un “blindaje” que evita que grupos organizados penetren su estructura, sin embargo, al desmantelar al Servicio Profesional Electoral (SPE), se corren riesgos en ese sentido. “Al fragilizar el aparato electoral, al someternos a la selección cada tres años de funcionarios provisionales, sin lugar a dudas se abre la puerta para que distintos grupos organizados, políticos o no políticos, intenten entrar con operadores propios la estructura del INE. “Nos toca a nosotros con la pierna y el brazo que nos queda, tratar de impedir esto…Vamos a acudir a la próxima elección, como actores, como organizadores, con menos capacidades físicas que las tenemos hoy, pero no estamos muertos”, indicó.

Retiro voluntario En medio de la discusión y votación del llamado Plan B de la reforma electoral, el presidente del INE, Lorenzo Córdova, dio a conocer que René Miranda Jaimes, director del Registro Federal de Electores (RFE), y Manuel Carrillo Poblano, coordinador de asuntos internacionales del Instituto Nacional Electoral (INE), optaron por su retiro voluntario. Comentó que la decisión le fue notificada antes del 10 de noviembre, fecha límite para que los funcionarios del INE que cumplieran con los requisitos que establece el Programa Especial de Retiro y Reconocimiento del Personal de la Rama Administrativa y del Servicios Profesional Electoral del INE, conocido como Programa de Retiro Voluntario, se inscribieran en el mismo “Me comunicaron hace algunos meses su decisión de acogerse al Programa Especial de Retiro y Reconocimiento del Personal de la Rama Administrativa y del Servicios Profesional Electoral del INE, conocido como Programa de Retiro Voluntario”, indicó Córdova Vianello. Aclaró que su decisión de dar a conocer la decisión que tomaron Miranda Jaimes y Carrillo Poblano es para evitar especulaciones, “a las que son muy dados algunos, en el sentido de que es importante señalar que esta decisión individual y en ejercicio de sus derechos estatutarios se tomó en una coyuntura, se tomó hace meses y en una coyuntura distinta a la actual”. Ambos funcionarios, con 26 y 29 años en el INE, respectivamente, concluirán el desempeño de sus respectivas responsabilidades al término de este año.

 

Con información de Expansión

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