El paso del huracán Kay por la zona norte de Baja California Sur dejó afectaciones en las carreteras y caminos que impiden la llegada a las comunidades del municipio de Mulegé; además, ya como tormenta tropical, ayer provocó inundaciones y deslaves en otras cinco entidades.

“Tenemos cortes carreteros en todas las vías alimentadoras que llegan a Punta de Ojos, a Tortugas… no hay modo de llegar por vía terrestre y nos vamos a tener que mover por la aérea”, dijo el gobernador Víctor Manuel Castro en MILENIO Televisión.

Señaló que no hay servicio de energía eléctrica en la zona de Mulegé, pues las ráfagas de viento tumbaron postes y cables y aunque confió en que el servicio se restablezca pronto, dijo que los estragos carreteros impiden el paso de los vehículos de Comisión Federal de Electricidad.

El funcionario mencionó que cuando el nivel del agua baje y se restablezcan los caminos, serán las autoridades estatales y municipales las que comenzarán con los censos para documentar las pérdidas de los habitantes y elaborar un plan de acción.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que la tormenta tropical Kay se mantiene frente a la costa occidental de Baja California y su centro se localiza a 160 kilómetros al suroeste de Ensenada y a 240 al oeste–noroeste de Punta Baja, con vientos de hasta 65 kilómetros por hora.

“El SMN, de la Comisión Nacional del Agua, en coordinación con el Centro Nacional de Huracanes, establece nueva zona de prevención por efectos de tormenta tropical desde Cabo San Quintín hasta la frontera con EU.

En un comunicado, indicó que se mantendrán lluvias torrenciales en Baja California, intensas en Sonora e intervalos de chubascos en Baja California Sur.

Estas precipitaciones dejaron ayer inundaciones en los municipios de Mexicali, San Felipe, Tijuana y San Quintín, así como el bloqueo de algunas carreteras y el aumento en el nivel de la Laguna Salada, que no recibía agua desde mediados de 1980.

En el Valle de Mexicali la corriente de agua arrastró al conductor de un vehículo a un canal de riego, de donde fue rescatado por policías.

Mientras, la autopista Centinela–La Rumorosa y la carretera libre de Ensenada a San Felipe, además de la Transpeninsular, cerraron por las lluvias.

En Sonora, autoridades decretaron el cierre a la navegación en la zona del Alto Golfo de California, que incluye Peñasco y San Luis Río Colorado; en este último municipio la comunicación está acotada por la crecida de arroyos.

Además, una tromba en la capital de Colima provocó el desbordamiento del arroyo Pereira inundando las inmediaciones de la central camionera y dejando varados a decenas de vehículos.

En Sinaloa cerraron las escuelas y los puertos por las intensas lluvias; además, cientos de familias tuvieron que refugiarse en albergues temporales por el desbordamiento de arroyos. También hubo daños en Jalisco.

Con información de Milenio

Leave a reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *