La Corte se derrotó a sí misma
Francisco Garfias
Otra vez Morena se salió con la suya. No se alcanzaron los ocho votos requeridos para que la SCJN invalidara una parte de la reforma judicial, como proponía el proyecto de sentencia del ministro Juan Luis González Alcántara. El ministro Alberto Pérez Dayán fue la diferencia. Su voto en contra del proyecto inclinó la balanza a favor de la desaparición de la división de Poderes real, pero también del sistema de pesos y contrapesos.
Se proyectaba una votación ocho a tres. Fue siete a cuatro. El voto de Pérez Dayán se sumó al de las ministras identificadas con la 4T: Yasmín Esquivel, Loretta Ortiz y Lenia Batres. Hicieron posible la reforma que va provocar el cese de la mitad de los juzgadores el año que entra y a la otra mitad en 2027. La mayoría va a ser reemplazada por jueces, magistrados y ministros electos por “voto popular”. Los menos aceptaron ser candidatos a mantener el cargo, sin garantías de repetir.
Otra vez Morena se salió con la suya. No se alcanzaron los ocho votos requeridos para que la SCJN invalidara una parte de la reforma judicial, como proponía el proyecto de sentencia del ministro Juan Luis González Alcántara. El ministro Alberto Pérez Dayán fue la diferencia. Su voto en contra del proyecto inclinó la balanza a favor de la desaparición de la división de Poderes real, pero también del sistema de pesos y contrapesos.
Se proyectaba una votación ocho a tres. Fue siete a cuatro. El voto de Pérez Dayán se sumó al de las ministras identificadas con la 4T: Yasmín Esquivel, Loretta Ortiz y Lenia Batres. Hicieron posible la reforma que va provocar el cese de la mitad de los juzgadores el año que entra y a la otra mitad en 2027. La mayoría va a ser reemplazada por jueces, magistrados y ministros electos por “voto popular”. Los menos aceptaron ser candidatos a mantener el cargo, sin garantías de repetir.
* Mientras se desarrollaba la sesión, miles se manifestaban fuera de la SCJN. Sus consignas y carteles eran contra la reforma, que ven como amenaza a la autonomía del Poder Judicial. Los jueces, magistrados y trabajadores del PJ se mezclaban con integrantes del Frente Cívico, opositores, ciudadanos que dicen no a la reforma de AMLO. Por allí andaban Xóchitl Gálvez, Margarita Zavala, Guadalupe Acosta y algunos más.
Llegaron entusiasmados por la posibilidad de invalidar. Se fueron con una sensación de derrota. El entusiasmo se vino abajo cuando se enteraron del voto en contra de Pérez Dayán, al que exigían “¡Honra tu toga!”. En mantas colgadas en los árboles se leía: “Nadie se burla de los mexicanos, sólo Morena…” o “en defensa de la República y la Justicia”.
* En el mundo de la política el nombre más mencionado ayer era el de Pérez Dayán, héroe fugaz de la 4T. Dijo Ricardo Monreal, líder de la mayoría en la Cámara de Diputados: “La sensatez del ministro Pérez Dayán al rechazar la propuesta del ministro González Alcántara evita una violación constitucional y la invasión de facultades del Legislativo. La improcedencia del proyecto era evidente. Deseo que otros de sus pares actúen en forma congruente”.
Alito Moreno, presidente del PRI, se refirió al inusual “giro” del ministro. Lamentó: “Él ha asegurado que la reforma del oficialismo pueda quitar a todos los jueces del país mediante una tómbola”. Y preguntó al multicitado ministro: “¿Ya lo doblaron?”. De las reacciones registradas la más atinada fue la del senador Gerardo Fernández Noroña. “Hoy la Corte se derrotó a sí misma”, dijo el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara alta. Hasta allí estuve de acuerdo.