En el blanco por Fernando Zepeda H.

*La FGR, el Gobernador y las investigaciones en torno al caso Zambada-Guzmán López y homicidio de Cuen Ojeda, con más dudas que aciertos
*A más de un mes del escándalo Zambada y asesinato de Cuenn Ojeda, la FGR ayer “levantaba” información en el lugar donde supuestamente se dieron los hechos
*En más de una ocasión el Gobernador declaró que “liberarían a la UAS de Cuen Ojeda”. Hoy sin el exrector, solo queda la búsqueda del control.
*Los directivos de la UAS entre defender el legado de su líder o ceder ante el Estado
*Dos jueces otorgan suspensión para evitar que la reforma judicial no se discuta en Cámara de Diputados. Juristas y especialistas en derecho lo reprueban
*Militares, Guardia Nacional y policía estatal lanzarán operativo en la zona serrana de El Rosario donde desde hace semanas se libra una violenta lucha entre grupos criminales

La FGR-Rocha. En un principio, muchos pensaron que la Fiscalía General de la República pondría contra la pared al Gobierno de Sinaloa. Así se entendió cuando atrajo los casos de Ismael Zambada y Joaquín Guzmán López, con los sucesos del 25 de julio. Y también el del asesinato de Melesio Cuen Ojeda, que se dio el mismo día y todo parece indicar que en el mismo lugar en donde supuestamente fue “secuestrado” y conducido a Estados Unidos Zambada.

Lo dicho por Zambada es que acudió a una reunión en la que estarían el Gobernador Rubén Rocha Moya y Cuen Ojeda, supuestamente para mediar en el conflicto entre ambos personajes. Quedó evidenciado que la Fiscalía de Sinaloa manipuló el caso y entonces vino la “renuncia” de la Fiscal Sara Bruna Quiñonez. La FGR mandó la señal de que venía con todo, para cumplir la instrucción presidencial; “Caiga quien caiga”. La FGR debió de haber ordenado que todos los funcionarios de la Fiscalía en Sinaloa que tuvieron que ver directa o indirectamente en el caso, fueran presentados y tomar sus declaraciones.

El Gobernador debió de haber ordenado que todos esos funcionarios salieran de la Fiscalía estatal para responder a las irregularidades en las que incurrieron. Pero en esto último no ha sido así, en lo primero pareciera que se está cumpliendo. Pero a medias. El Gobernador debió de haber sido citado por la FGR y no solo probar que efectivamente estuvo en Los Ángeles, mostrando el sellado de su pasaporte y el plan de vuelo realizado por el avión particular. Ya pasó más de un mes de los hechos y todavía el Gobernador no comparece ante la FGR. Dice él que si lo citan acude.

 

También a más de un mes de los hechos, ayer personal de la FGR aseguró el lugar en donde supuestamente se dieron los hechos del 25 de julio. Donde Zambada y Guzmán López salieron para dirigirse a una pista y abordar un avión que los condujo a Estados Unidos. Mismo sitio en donde todo parece indicar fue asesinado Cuen Ojeda. Hasta estos momentos, la FGR no ha logrado precisar cómo sucedieron los hechos que condujeron a Zambada y Guzmán López a Estados Unidos. Tampoco quien o quienes asesinaron a Cuen Ojeda y el posible móvil. La FGR no ha dicho nada oficialmente sobre si estuvo o no el Gobernador en el mismo sitio. Rocha Moya lo ha negado categóricamente. La FGR aún no. Hasta hoy, las dudas son las que prevalecen. Y solo dan paso a las especulaciones y versiones extraoficiales.

Cuen, la UAS y lo que viene. Una desgracia, como es el asesinato de Melesio Cuen Ojeda, pareciera marcar la instauración de una relación institucional entre la Universidad y el Gobernador Rubén Rocha Moya. El encargado de la rectoría de la UAS Robespierre Lizárraga aseguró a este reportero que hace unos días se dio un encuentro entre él y el Gobernador. Y no fue uno más. ¡No!. Parece que ambas partes están buscando un punto de equilibrio para continuar adelante sin los enfrentamientos que hasta hoy han arrojado más de una decena de procesos penales. El Gobernador había siempre sentenciado la necesidad de “liberar” a la UAS de Cuen Ojeda.

El conflicto entre ambos personajes era precisamente el control de la universidad. Ni más ni menos. Ahora que fue asesinado Cuen Ojeda, el argumento del Gobernador queda sin efecto. ¿De qué o de quien liberará, si Cuen Ojeda ya está muerto?. Queda solamente el interés de controlar a la institución. Y habrá que ver si quienes están al frente de la UAS y algo importante, su sindicato, están dispuestos a ceder o como ellos mismos lo han dicho, defender el legado de Cuen Ojeda.
Sacuden el panal. Dos jueces, uno de Morelos y el otro de Chiapas, otorgaron una suspensión para que la Cámara de Diputados no pueda discutir el dictamen de la reforma al Poder Judicial. Esta discusión esta programada para llevarse a cabo mañana lunes. La decisión de estos jueces desató una intensa polémica nacional entre especialistas del derecho.

La mayoría de ellos aún y cuando se declararon en contra de la reforma judicial, no estuvieron de acuerdo con lo resuelto por ambos jueces. El abogado, jurista y político mexicano Diego Valadés considerado entre los más duros críticos de la Reforma Judicial consideró que la resolución de esos dos jueces “no tiene fundamento jurídico” y que es una “decisión carente de sustento en la Constitución y en la Ley”. Esta resolución pone con la “soga al cuello” ante la opinión publica al aparato judicial. Y ya el coordinador de la Cámara de Diputados Ricardo Monreal advirtió que “no se acatará esa suspensión”. Monreal ya está en la ruta de quien mandó “al diablo” a las instituciones. Y que no “vengan de que la Ley es la Ley”. Hay un procedimiento jurídico que contempla la Ley para impugnar esta resolución de esos dos jueces. Ese sería el camino legal. Pero en México pareciera que lo legal, el respeto a la Ley, ya quedó en letra muerta.

Una “guerra” silenciosa. El Gobierno ya se percató de lo que está sucediendo en la sierra de El Rosario. Y ayer ya acordaron la movilización de elementos militares, Guardia Nacional y policía estatal para intentar “pacificar” la zona. Desde hace varias semanas, dos grupos antagónicos mantienen una intensa lucha por el control de esa zona. Vecinos de las comunidades de La Rastra entre otras comentan que las “bajas” se cuentan por decenas. Que cuando aparece algún cuerpo por la carretera de la zona serrana hacia la cabecera municipal de El Rosario, es porque “se les murió en el camino”. El contingente pondrá especial interés en las comunidades de El Tecomate, Santa María, La Rastra, Las Negras y otras comunidades en donde los repostes indican que la violencia se ha apoderado de esa zona serrana. El encuentro para planear los operativos estuvo encabezado por el Comandante de la Novena Zona Militar Porfirio Fuentes, el comandante de GN José Luis Chiñas y el Secretario de Seguridad Pública en Sinaloa Gerardo Mérida Sánchez.

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