La rebelión en el PRI

La tolerancia llegará a tal nivel que las personas inteligentes tendrán prohibido pensar para no ofender a los imbéciles”. Frase de Fiódor Dostoyeski.

Oswaldo Villaseñor

¿Hay una rebelión en el PRI? Por los discursos y posturas de muchos personajes que escribieron historias buenas y malas en el PRI pareciera que si la hay.

El detalle es muy simple. Muchos de ellos, de los que ahora gritan, permanecieron callados por mucho tiempo y sobre todo el pasado proceso electoral, o bien se fueron a otros partidos en busca de nuevas oportunidades de seguir prendidos de la ubre presupuestal.

Esa práctica de ser del PRI cuando toca hueso y renegar de él e irse a otro partido cuando no, le ocasionó una gran pérdida de confianza ciudadana a este partido

¿Ocupaba u ocupa una gran limpia de esos personajes el PRI? Si, si la ocupa.

Personajes que hoy se dicen priistas pero que ya se pasearon como candidatos o apoyadores de otros partidos, son los que hoy reniegan de lo que a todas luces es un abuso de Alejandro Moreno. Autoaprobarse reformas para continuar por 8 años más en la dirigencia nacional del partido.

¿Tienen razón quienes gritan en el PRI? Si la tienen y de sobra.

¿Tienen la calidad moral para gritar? Ahí está el detalle. Muchos o la gran mayoría no.

Ninguno de los que hoy gritan pueden ser la solución para el rescate del PRI.

Así, en una aparente rebelión al interior del PRI, Alejandro Moreno continúa su ruta para mantenerse como el dueño de la franquicia. La trampa para los detractores ya está puesta y con el queso enganchado.

El PRI convocará a un proceso abierto en el cual se podrá inscribir todo aquel que lo desee.

El problema es que la consulta será entre los consejeros del partido. Todo o casi todo el consejo lo controla Alito Moreno.

¿Qué pudieran pedir un proceso abierto a la ciudadanía? Adelante, les dirán, solo que el que lo pida, que lo pague al INE para que este se encargue de contar los votos.

En pocas palabras, no hay vuelta de hoja. Alejandro Moreno ya es el dueño del PRI y solo falta escriturarlo el día de la asamblea.

¿Qué les queda a quienes hoy protestan con razón de sobra por el agandalle de Alejandro Moreno? La vía legal.

El detalle es que muchos de quienes pudieran atreverse a firmar, saldrá con que ni militantes activos del PRI son porque ni siquiera se registraron. Otros más, serán expulsados por traición al partido por haber apoyado a candidatos o gobiernos emanados de otras siglas y muchos más, ni siquiera se atreverán a rebelarse de frente y se quedarán donde están. Afuera del partido.

Aquí con este escenario, hay algo cierto. El agandalle de Alito es real y es un hecho consumado.

Ahora la pregunta de fondo debe ser la siguiente. ¿Para qué quiere Alejandro Moreno al PRI? Solo hay dos respuestas.

Veamos cuáles son.

1.-La primera de ellas, es que financiera y políticamente no es nada despreciable ser el dueño de una franquicia de partido. El presupuesto público para un PRI reducido en infraestructura y personal como quedará, será arriba de los 1200 millones al año. Muy bien negocio. En años de elecciones el presupuesto se incrementa y puede llegar hasta los 2 mil millones de pesos. Eso es lo que muchos estiman vale el negocio de tener el control del PRI en sus manos.

2.-El dueño del Partido, es quien tiene el poder de la firma para dar candidaturas y para otorgarse las pluris. En pocas palabras, tiene la garantía de ser actor principal y de paso seguir prendidos de los presupuestos públicos. Otro “caidito”.

3.-Y aquí el punto fundamental. ¿Lo quiere para convertirlo en un partido satélite de Morena al igual que hoy lo es el Partido Verde y El PT y solo negociar posiciones como ya lo hizo cuando se le respetó Durango o Coahuila por ejemplo.

Si Alejandro Moreno convierte al PRI en un partido satélite, lo más seguro es que este partido se extinga o pierda su registro en el 2033. Para el 2027 le alcanzará al PRI mantener el registro aún cuando su tamaño baje del 11% de votación emitida y obtenida al 6 por ciento.

Para el 203O que sea la elección presidencial también le pudiera alcanzar ya sea, porque el mismo Alito vaya como candidato a la presidencia o porque se alió a Morena. Pero de que le alcanza le alcanza. Para el 2033 ya no le alcanza, si la ruta que siga el nuevo dueño del PRI es la de convertirlo en un partido satélite.

4.-El otro camino que pueda seguir el PRI bajo la conducción de Alejandro Moreno es que efectivamente vaya a su rescate con la formación de nuevos liderazgos regionales. El PRI ocupará cuando menos 300 nuevos líderes para

competir por cada uno de los 300 distritos electorales.

Más de 2400 que compitan por cada uno de los municipios del país y miles y miles que vayan a competir para las diputaciones locales y regidurías.

En pocas palabras, el PRI tiene que regresar a su viejo esquema de parir liderazgos regionales, pero sepultar a los viejos que le hicieron daño. Solo a esos viejos. Los que le dieron prestigio, deben ser la inspiración y guía de los nuevos cuadros.

5.-Alejandro Moreno no será un líder que se apodere de la dirigencia legitimado por la vía democrática aún con el remedo de proceso que hará.

Tampoco será líder legitimado por su carisma o batallas ganadas. Durante su mandato se perdió casi todo lo que se tenía ganado.

Entonces su única ruta de legitimación será en los hechos y para eso se ocupa resultados positivos.

6.-Alejandro Moreno querrá ser candidato a la presidencia en el 2030 y si quiere ganar ocupará crear la nueva estructura de líderes regionales del PRI.

Pero algo muy importante. El PRI tendrá que ser un verdadero partido de oposición si quiere reencontrarse con la gente.

En si, tendrá que parir una nueva generación de líderes sociales con causa, es decir que defiendan alguna lucha social.

7.-Así, lo único cierto al día de hoy es que la permanencia de Alito ya es cosa juzgada. Lo incierto es saber para que quiere al PRI. ¿Para rescatarlo y refundarlo o para negociar en su beneficio personal y grupal?

Ya veremos dijo el ciego.

Habrá que estar pendientes.

PASO A PASITO.-El gober Rocha les salió adelante a la UAS. Aceptó o programó el encuentro en la SEGOB, en presencia de su titular Luisa María Alcalde para el próximo martes.

El rector de la UAS, Robespierre Lizárraga anunció una manifestación en la Ciudad de México para la próxima semana y tentativamente para el día viernes.

De hecho, la organización puede continuar. No se augura un acuerdo de esta reunión toda vez que el gober Rocha ya fijó su postura. Los procesos penales continúan y la reforma a la ley orgánica de la UAS también.

Ayer directivos y personal de la UAS salió a las calles a informar al ciudadano del discurso de odio que entona el gobernador en contra de la Universidad y de sus funcionarios. Tampoco les falta razón para hacerlo.

En fin, veremos que sale de ese nuevo encuentro.

OTRO PASITO.-Dice una de las máximas más conocidas de Maquiavelo. “El fin justifica los medios”

Ayer se conoció otro revés más que le dio la Suprema Corte al Congreso Local. Ahora en una controversia que promovió Jesús Estrada Ferreiro en contra de facultades que se auto otorgó el Poder Legislativo local de Sinaloa para mediante una reforma de ley intervenir en la administración de los recursos del Ayuntamiento de Culiacán.

La Corte le dio palo al Congreso y le dio dio la razón a Jesús Estrada Ferreiro.

Lo curioso aquí, es que esta ley que ahora se sabe reformó de manera ilegal e inconstitucional por parte del Congreso y que Estrada Ferreiro se negó a aplicar, fue la que sirvió para acusar de desacato al entonces alcalde y posteriormente proceder a desaforarlo.

En pocas palabras. El fin se consiguió. Quitar a Estrada y apoderarse del Ayuntamiento de la capital Sinaloense.

Días atrás, el Congreso también perdió otra batalla legal en contra también del propio Estrada al evitar que continuara la intentona de juicio político en su contra.

También el Congreso acaba de perder otro caso de legislar para entrometerse en la UAS.

Cómo que ya son muchos casos y con el mismo patrón de conducta. Al final queda que violentando la ley por parte de quien debe ser el primero en respetarlas, se han cumplido los objetivos.

A Estrada lo sacaron de la alcaldía de Culiacán y no lo dejaron gobernar y a Jesús Madueña lo sacaron de la rectoría y tampoco lo han dejado desempeñar el cargo.

Súmele al depuesto alcalde de Mazatlán Luis Guillermo Benítez.

Eso sí, Estrada le ganó la careada al Congreso y luego, luego, la ASE anunció nuevo proceso penal en su contra.

El fin justifica los medios.

PASITO CHÉVERE.-

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