Las autoridades electorales batallan para mantener a raya a las ‘corcholatas’ de Morena y Va por México
Los aspirantes de Va por México tendrán que sujetarse a las mismas reglas que se impusieron a sus rivales de Morena. No podrán llamar al voto, hacer propuestas de campaña ni promocionar su imagen o la plataforma de sus partidos. Así lo anunció el Instituto Nacional Electoral (INE), en una decisión que extiende el limbo legal en el que se encuentra la carrera por la sucesión presidencial de ambas coaliciones. Pese a las quejas de Movimiento Ciudadano (MC), el único partido con registro que no se ha adelantado en los tiempos que marca la ley, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación desechó, por su parte, las impugnaciones por actos anticipados de campaña y confirmó que las corcholatas, como se conoce a quienes levantan la mano para suceder a Andrés Manuel López Obrador, sí pueden hacer giras o recorridos por el país.
Jorge Álvarez Máynez y Salomón Chertorivski, legisladores de Movimiento Ciudadano, presentaron una impugnación contra todos los acuerdos aprobados por el Consejo Nacional de Morena el pasado 11 de junio, en el que las seis corcholatas y la dirigencia del partido gobernante pactaron las reglas de competencia para definir al candidato presidencial en las elecciones de 2024. Los diputados argumentaron que sus rivales habían incurrido en actos anticipados de campaña y se habían adelantado cinco meses a los plazos establecidos en la normativa electoral, lo que les daba una ventaja injusta frente al resto de fuerzas políticas.
La Comisión de Quejas y Denuncias del INE ya había desestimado el recurso la semana pasada en una decisión polémica que dividió a los consejeros electorales. El Tribunal Electoral, que tiene la última palabra, argumentó por mayoría de votos que Álvarez Máynez y Chertorivski no tienen la “legitimación” ni el “interés jurídico” para tumbar el proceso interno de Morena y que solo MC, como partido político, podía presentar la queja. Volvió a ser una votación dividida, tres magistrados dieron la razón a quienes se quejaron y otros tres pensaban que debía ser desestimado, pero el asunto se dirimió por el voto de calidad del presidente del Tribunal, Reyes Rodríguez Mondragón. “Conforme pasan los días y las semanas, aumenta la urgencia para que las autoridades electorales pongan un alto a las precampañas ilegales de Morena”, reclamó Juan Manuel Ramírez Velasco, otro diputado de la formación naranja, que calificó el proceso interno del partido del presidente como un “fraude a la ley”.
Movimiento Ciudadano no ha sido el único que se ha quejado. En un inicio, otras fuerzas opositoras como el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se habían sumado a los reclamos y presentaron sus propios recursos legales. Pero menos de dos semanas después de la celebración del Consejo Nacional de Morena, la coalición Va por México, integrada por ambas formaciones y por el Partido Revolucionario Institucional, anunció que también iba a comenzar a definir quién será su candidato en las elecciones de 2024, en otro proceso interno al filo de la ley.
Claudia Zavala, la integrante de la Comisión de Quejas que ha sido más crítica sobre la legalidad de la competencia entre las corcholatas, puso el dedo en la llaga y cuestionó a Va por México por reclamar una cosa y hacer otra. Zavala, de hecho, reclamó a todas las fuerzas políticas una especie de doble discurso en el que se ve la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. “¿Es un acto simulado para poder dar la vuelta a las reglas establecidas?”, cuestionó la consejera del INE. Esta vez fue Morena quien solicitó las medidas cautelares contra los aspirantes del frente opositor y quien reclamó actos anticipados de campaña, repitiendo la receta que habían utilizado sus rivales semanas antes.
Desde que arrancó de facto la carrera por la sucesión el mes pasado, la Comisión de Quejas ha resuelto alrededor de una treintena de recursos, a menudo con resultados confusos y criterios ambiguos o basados en tecnicismos. Las corcholatas se han quejado de que no está claro qué está permitido y qué está prohibido, mientras que los quejosos acusan que se hace la vista gorda en las violaciones a la ley.
“Los actos que realicen las personas involucradas no deben tener como objetivo obtener el respaldo para ser postuladas como precandidatas a un cargo de elección popular”, señaló el INE en un comunicado sobre el proceso interno de Va por México, que precisamente se ha abierto para encontrar al aspirante más competitivo para 2024. Para evitar choques con la ley electoral, Morena usado la figura de “coordinador de los comités de defensa de la Cuarta Transformación”. La oposición ha copiado la estrategia y se refiere a su virtual abanderado como “responsable para la construcción del Frente Amplio por México”.
El INE también instruyó a los aspirantes de Va por México a presentar cada semana un calendario con su “recorridos de trabajo”, lo que en los medios de comunicación se ha reseñado como giras de campaña. La propaganda electoral no podrá apelar tampoco a la población en general y deberá tener una leyenda de que solo va dirigida a los participantes en el proceso interno. En el cruce de acusaciones y reclamos entre la oposición y la coalición gobernante, siguen siendo patentes las complicaciones de las autoridades electorales para hacer valer la ley.
Con información de El País