Las emociones, factor importante para sobrevivir al cáncer de mama
Las emociones forman parte importante de la vida de un ser humano, mismas que pueden perjudicar o favorecer el estado de salud de una persona. Y es precisamente en función del estado de ánimo como se puede estar predispuesto a llevar un estilo de vida saludable.
Una enfermedad como el cáncer de mama puede ser la respuesta a un estado emocional persistente como lo es el estrés, del que se desencadena una variedad de sentimientos que si no son manejados adecuadamente producen una alteración en las células que originan un tumor.
La tristeza, el miedo, la depresión, angustia, ira, frustración y hostilidad, son algunos de los sentimientos ligados al estrés, lo cual puede detonar en diversos padecimientos o enfermedades.
El cáncer de mama es la primera causa de muerte en mujeres en México, padecimiento que se asocia a diversos factores, entre ellos: Genes hereditarios, edad avanzada, obesidad, menopausia tardía, consumo de alcohol, tabaquismo, ausencia de embarazos o embarazos a edades tardías, sin embargo en los últimos años la medicina moderna ha puesto atención a la supresión emocional.
Medicina ortodoxa solo veía la “falla” orgánica
Liz Cano, especialista en bienestar emocional e integral, manifiesta que se está transitando a ver al ser humano de una forma integral, pues hasta el siglo pasado la medicina tradicional ortodoxa sólo veía la falla orgánica, pero conforme ha ido avanzando la ciencia ha detectado que del conjunto de personas que manifiestan un síntoma, el 90 por ciento está relacionado a lo que pasa en la vida del ser humano y son muy pocos que desarrollan el padecimiento relacionado estrictamente con lo fisiológico.
Esta situación, señala, se debe a que el cuerpo está programado para reaccionar, no nada más se mantiene en vida con alimento, aire, agua y sueño, sino a través de él se perciben los sentimientos, se disparan las emociones y cada pensamiento que tiene afectación directa.
El cáncer de mama, está más enfocado al género femenino y a las circunstancias que están viviendo las mujeres que atraviesan por esta enfermedad, aunque también este padecimiento lo presentan algunos hombres.
Desde el punto de vista integral, el síntoma como el cáncer, es una forma a través de la cual el cuerpo habla y se activa como mecanismo de defensa y supervivencia por algo que está pasando en la vida de la mujer.
Explica que por el tipo de órgano que es la mama o seno, es importante explorar lo que le pasa a la mujer en su núcleo más cercano, sobre todo en su familia, pues se refleja cuando existe una preocupación por un hijo, la pareja o una alguien muy cercano a ella.
Para detectar qué detonó el síntoma, las circunstancias no se buscan en lo actual, sino hay que remontarse antes de que apareciera, ya que esa mujer vivió una situación difícil quizás amenazante o peligrosa que tiene que ver con su núcleo más cercano.
“Quien cuida más es una madre, quien está al pendiente de la familia, de la pareja, de los hijos, entonces hay que ver qué es lo que le pasa a esta persona en relación a este síntoma (cáncer), pero que tiene que ver antes de que se le manifestó”.
“Quien cuida más es una madre, quien está al pendiente de la familia, de la pareja, de los hijos, entonces hay que ver qué es lo que le pasa a esta persona en relación a este síntoma (cáncer), pero que tiene que ver antes de que se le manifestó”.
Desde la metodología de ciencia que son las 5 leyes biológicas, señala que hay ciertas características importantes que ocurrieron alrededor de este evento al que se le llama shock, el cual activó los mecanismos de supervivencia llamados “células cancerígenas”.
Una de las características tiene que ver que con que la persona lo vivió en soledad, no se lo contó a alguien, se lo guardó por mucho tiempo, no lo expresó, se lo calló o cree que está sola en esta situación, que no cuenta con alguien más que la apoye y que solo ella lo puede resolver.
Cuando hay una separación, se puede activar en la mama un síntoma como respuesta de mecanismo de supervivencia, pues una separación para una mujer puede ser muy difícil porque significa quedarse sola con los hijos, al no saber cómo sostener la familia, se encarga todo esto y es cuando el cuerpo habla.
“Nos olvidamos de nuestras propias necesidades, emociones, pensamientos, por estar salvando a la familia, a los hijos o a una pareja”.
“Nos olvidamos de nuestras propias necesidades, emociones, pensamientos, por estar salvando a la familia, a los hijos o a una pareja”.
Cada emoción tiene un contenido bioquímico en nuestra fisiología que no se queda nada más en lo mental, sino que la emoción se siente gracias a esa bioquímica en donde se dispara un cóctel interno que si no se procesa conscientemente, se recicla.
“Es como si fuera un ácido que traemos dentro de nosotros y no hay esa liberación al no expresarlo”.
“Es como si fuera un ácido que traemos dentro de nosotros y no hay esa liberación al no expresarlo”.
Inteligencia emocional, la mejor prevención
La especialista señala que la mejor prevención es el saber desarrollar la inteligencia emocional y el desarrollo de una educación mental, ya que si se aprende a gestionar las emociones y expresarlas en el momento en el que se están generando, se está procesando momento a momento lo que pasa en la vida de una forma funcional antes de que el cuerpo hable de los procesos internos que se tienen que arreglar.
Mientras más consciente se es de los procesos internos mentales y emocionales, menos enfermedades o síntomas se manifiestan porque se arreglan las circunstancias en el momento en el que se originan.
Así lastima la sexualidad y sensualidad
El cáncer de mama y el proceso oncológico que se lleva, genera un impacto muy importante en la vida de las mujeres al ver cómo se deteriora su identidad femenina, pues a lo largo de la vida se aprende a ser mujer a través de otras mujeres.
Durante el proceso que pasan las mujeres con cáncer por la situación compleja ante su identidad de género, al perder el cabello, cejas, pestañas y mamas, pues no solo luchan con el estrés emocional y el tratamiento, sino que se enfrentan a diversos cambios y pérdidas, lo que afecta la identidad de la feminidad.
Laura Cueva, terapeuta sexual, manifiesta que ante cualquier situación adversa como es una enfermedad ya sea el cáncer de mama, un abuso sexual, una violación, una pérdida o cualquier tipo de duelo, se deteriora la identidad que como mujer se ha formado a lo largo de la vida.
La sexualidad se construye desde diversos aspectos como el cuerpo, pero también desde un entorno social y cultural, que de acuerdo a la historia establece ciertos roles y estereotipos que hablan de feminidad.
“Hemos aprendido en esta cultura a través de la historia a que una mujer es bella, es una mujer plena y goza de ciertos estereotipos a través de un cuerpo hermoso, de grandes senos, de grandes caderas, cabello largo, labios rojos, de un vestido lindo, entonces cuando esto no está, por supuesto que queda muy lastimada nuestra identidad”.
“Hemos aprendido en esta cultura a través de la historia a que una mujer es bella, es una mujer plena y goza de ciertos estereotipos a través de un cuerpo hermoso, de grandes senos, de grandes caderas, cabello largo, labios rojos, de un vestido lindo, entonces cuando esto no está, por supuesto que queda muy lastimada nuestra identidad”.
Una mujer con cáncer tras un proceso oncológico, con un cuerpo mutilado, deteriorado y desgastado por los efectos de la quimioterapia y de la radioterapia, desconoce su cuerpo y su imagen, porque queda lastimada su identidad de mujer, es por eso que a través de procesos creativos de la terapia sexual se busca rediseñar esa imagen e identidad para volver a aprender lo que realmente es para ellas la identidad.
Cómo fortalecer vínculos afectivos
Los roles que se van viviendo en este proceso, provoca que el vínculo afectivo se vea deteriorado las expectativas que se tienen de vida en pareja ante la sexualidad y el placer se ve limitado.
Explica que la falta de lubricación por la ausencia de los estrógenos debido a que la mayoría de los cánceres tienen que ver con hormonas, afecta la salud sexual, generando dispaurenia (relaciones sexuales dolorosas), situación que repercute en la experiencia de la sexualidad.
Al perderse la experiencia erótico-efectiva, puede llegar a lastimar la relación de pareja, pues existen relaciones en donde no se puede fortalecer el vínculo a través de buenos momentos debido a que es un episodio complicado.
“Muchas de las parejas pierden una relación afectiva, no se vinculan, no tienen espacios de intimidad por las consecuencias que trae también el deterioro de la identidad de la mujer, la sexualidad como se ha construido y tanto tabú, son temas que no hablamos en pareja o ante el médico tratante, donde ni siquiera se tocan”.
“Muchas de las parejas pierden una relación afectiva, no se vinculan, no tienen espacios de intimidad por las consecuencias que trae también el deterioro de la identidad de la mujer, la sexualidad como se ha construido y tanto tabú, son temas que no hablamos en pareja o ante el médico tratante, donde ni siquiera se tocan”.
La especialista, manifiesta que existen diversas técnicas de intervención que se utilizan en terapia sexual para que fortalezcan el vínculo de pareja, pues muchas de ellas se separan debido a que se rompen proyectos por no saber cómo afrontarlo.
Las mujeres que enfrentan un cáncer, llegan con miedo y angustia, ya que su prioridad es la salud y salir adelante, pues existe el miedo a dejar a su familia, aunado al dolor y frustración ante la incertidumbre del proceso de esta enfermedad.
“Afortunadamente las estadísticas muestran que al detectarlo a tiempo podemos salvar nuestra vida y tener una calidad de vida mejor, pero ante un diagnóstico como es el cáncer de mama y otros, las primeras sensaciones son el miedo y la angustia”.
“Afortunadamente las estadísticas muestran que al detectarlo a tiempo podemos salvar nuestra vida y tener una calidad de vida mejor, pero ante un diagnóstico como es el cáncer de mama y otros, las primeras sensaciones son el miedo y la angustia”.
El acompañamiento a través de redes de apoyo como la familia, amistades, asociaciones y sociedad en general, es de suma importancia para que el proceso de una enfermedad como el cáncer se pueda vivir de una forma diferente.
Laura Cueva, manifestó que no hay mucha referencia en nuestro país sobre la protocolización de terapia sexual en mujeres con cáncer, por lo que consideró que tras el acompañamiento que incluya la sexualidad fenomenal se podrá tener mujeres más fuertes.
Con información de Milenio