“López Obrador realmente quiere cambiar a México”: Raymundo Gómez Flores, empresario
“López Obrador realmente quiere cambiar a México”: Raymundo Gómez Flores, empresario Andrés Manuel López Obrador ha hecho reflexionar a muchos y eso es necesario, opina Raymundo Gómez Flores, quien la semana pasada recibió el reconocimiento René Justin Rivial León que entrega el gobierno de Jalisco a los empresarios que contribuyen a mejorar la calidad de vida de la población del estado.
Gómez Flores tiene más de 25 años de trayectoria en los ramos de autotransporte, construcción, alimentos y turismo. Además, fue senador de la República por el PRI en la 58 Legislatura y es considerado por el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, como su mentor político.
En entrevista con EL UNIVERSAL, afirma que en este sexenio realmente se combate la corrupción y que el Presidente de verdad quiere cambiar al país.
Sobre el mandatario jalisciense, quien este fin de semana dijo estar preparado para aspirar a la Presidencia en 2024, considera que se trata de un “gallo probado”.
¿Cómo percibe usted la política nacional?
—Chistosa. Los amigos de Morena —no me gusta decirles corcholatas— andan enloquecidos; veo a unos con más ganas que otros. El problema es que difícilmente la oposición va a dar algo para escoger.
Tampoco se va a poder escoger en Morena porque lo va a escoger el Presidente. Cuando menos lo que hay es aceptable en términos generales, [Ricardo] Monreal es bueno, aunque lo tienen medio apartado, pero creo que se va a saber acercar. [Claudia] Sheinbaum es una persona capaz. Marcelo [Ebrard] es el más completo, el que vivió más los gobiernos neoliberales y le aprendió a eso. Sería un despropósito volverle a dar vuelta al barco para regresar a tiempos neoliberales. Creo que donde vamos estamos bien.
¿Cree que realmente estamos lejos del neoliberalismo?
—Contextualmente y desde el punto de vista técnico, sí. Llegó a muchos excesos el neoliberalismo, pero no a los que llegaron en otros países, por ejemplo en Chile.
¿Entonces sí ve que este gobierno se ha distanciado del neoliberalismo?
—En el discurso sí. En la práctica, los veo totalmente de derecha; la izquierda no se las veo por ninguna parte.
Hay quienes critican al gobierno actual y dicen que ha retomado prácticas del PRI, ¿qué opina?
—Es un jugueteo que no tienen que hacer. Se ponen a hablar del PRI de los 70; a mí honestamente me da risa. No creo que sea intención del Presidente volver al PRI de los 70, ni de los 50, ni los 60. No creo que vaya por ahí la cosa.
Quiere cambiar las cosas, pero no es fácil, no es cosa de cinco minutos; es una cosa que no entendemos. Yo no veo problema con respecto al socialismo o el comunismo del que hablan los detractores para hacernos pensar que todo es terrible. Se me hacen excesos todo lo que se dice. No pasa nada, no ha pasado nada. El país, en términos generales, está caminando.
¿Ha habido algún cambio positivo o negativo en estos años?
—Yo creo que [el Presidente] ha hecho reflexionar a mucha gente y la reflexión siempre es conveniente. Sí creo que se esté atacando la corrupción, pero con estos nuevos sistemas de leyes donde puedes negociar el delito, la pena y la cárcel, es complicado. Es un sistema que no conocíamos.
El fin de semana Enrique Alfaro dijo estar listo para aspirar a la Presidencia de la República en 2024, ¿qué opina?
—Enrique Alfaro es un gallo probado. Donde lo pongas pasa la báscula y está listo para enfrentar a cualquier oponente. Buscar la Presidencia es complejo y esperaría que Enrique, sobre todo, tenga ganas porque eso es fundamental. Te metes a ese circo y se acabó tu vida; si te va bien, ganas, estás los seis años y sales a querer estar con tus nietos. Quedas verdaderamente vapuleado. Ese es el tema, porque Enrique es muy joven.
¿Lo ve con ganas?
—No sé. Creo que está viendo cada vez más cerca el tamaño del problema al que se va a meter, y tienes que entregar tu vida a la causa.
¿Qué fortalezas y debilidades ve en Alfaro como hipotético candidato a la Presidencia?
—En un balance, ganarían las fortalezas. Tiene debilidades que son producto de sus fortalezas. Es aparentemente tosco porque le gusta hablar claro, rápido y tratar de llegar a una solución que no moleste o lastime a nadie. Esa fortaleza de alguna manera podría ser su debilidad porque a la gente no le gusta que le digan la verdad. En general es un hombre preparado y tiene una experiencia política importante.
La revisión del pacto fiscal hizo muy visible a Alfaro, ¿cree que pueda potenciar una candidatura?
—Hasta donde entiendo, el pacto fiscal es muy difícil modificarlo. Tenemos que llegar a un acuerdo honesto, cierto, pero tenemos que pagar más impuestos, aunque se oiga feo. Si las empresas pagan más impuestos, si las personas pagan más proporcionalmente, el Estado va a estar más fuerte y va a poder proporcionar mejores bienes y servicios. Yo creo que el país sí necesita una reforma fiscal, particularmente para repartir la riqueza.
¿Qué significa para usted el reconocimiento que recibió la semana pasada?
—Me sentí muy satisfecho, fundamentalmente porque me lo da alguien a quien quiero y respeto mucho, creo que ha hecho muy buen papel y puede ser que haga uno mejor, Enrique Alfaro (…) Se convocaron amigos, socios y familiares. Lo recibí con agrado y se lo agradezco mucho al gobierno del estado.
Con información de El Universal