Los desencuentros de Gerardo Esquivel y López Obrador… ¿qué pasará en Banxico?
Por: David Ordaz
El pasado 31 de diciembre, Gerardo Esquivel terminó su mandato como subgobernador del Banco de México y hasta el momento no sabemos quién pueda ocupar su lugar, puesto que el presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de la Secretaría de Hacienda, no propuso su ratificación.
Con la llegada de la 4T, Esquivel ha experimentado una serie de choques y malas experiencias, pues al inicio del sexenio, se le mencionaba como subsecretario de Egresos de Hacienda, nombramiento que se cayó y fue propuesto para concluir el periodo vacante que dejó Roberto del Cueto en Banxico por problemas de salud.
Hace unos meses, fue sugerido por México como presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), sin embargo, el pasado 20 de noviembre, los gobiernos de América Latina y el Caribe eligieron al brasileño Ilan Goldfajn como el nuevo presidente del organismo. Dicha decisión fue criticada por López Obrador, pero lo cierto es que hasta ahí quedó la “defensa” del presidente.
En su gestión como subgobernador, Esquivel se caracterizó por ser el voto disidente dentro en la Junta de Gobierno del banco central, al votar, casi siempre, por alzas poco arriesgadas en las tasas de interés.
Fiel a su estilo, AMLO no escatima es criticar a quien lo contradiga y en algún desencuentro, calificó a Esquivel como un “ultratecnócrata”. Cabe recordar que, en 2018, cuando López Obrador era presidente electo, Esquivel afirmó que la decisión de cancelar el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM) contribuyó a la volatilidad de los mercados.
Más recientemente, otros de los roces que ambos han tenido está el momento en que Esquivel indicó que la ley no permite al gobierno federal disponer de las reservas internacionales para programar pagos de deuda, o cuando consideró inviable una propuesta del presidente de pagar deuda pública anticipada con recursos de los Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional.
El pasado 20 de diciembre, Andrés Manuel López Obrador dijo que la designación en Banxico se resolvería en cuestión de días.
“Hay ya una propuesta de la Secretaría de Hacienda, pero todavía no se presenta, nos faltan estos días, concluye el mandato de Gerardo Esquivel hasta finales de mes (…) Todavía no está resuelto, pero ya se va a ver estos días”, dijo.
Entre los nombres que se han manejado para ocupar el cargo están los de los subsecretarios Gabriel Yorio y Juan Pablo de Botton, pero también el de Lucía Buenrostro, actual vicepresidenta de Política Regulatoria en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. Y por cierto, hermana de la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro.
Mientras el presidente López Obrador y el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O deciden, la realidad es que el Artículo 45 de la ley interna del Banco de México permite que la Junta de Gobierno se reúna, siempre y cuando cuente con la presencia de la gobernadora Victoria Rodríguez Ceja y dos subgobernadores, sin embargo, las decisiones sobre la política monetaria del país requieren del voto probatorio de la mayoría de los subgobernadores y en caso de algún empate, la gobernadora tiene voto de calidad.
Actualmente, la Junta de Gobierno está conformada por cuatro miembros: Victoria Rodríguez y las subgobernadoras Irene Espinosa, Galia Borja, así como Jonathan Heath. El quinto voto es clave para las decisiones de política monetaria en un momento en que la inflación parece haber llegado a su pico y la próxima reunión está programada para el mes de febrero.
Para documentar el optimismo, hace unas horas, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, advirtió que “un tercio de la economía mundial” estará en recesión este año, ya que las tres grandes economías globales (EUA, la UE y China) “se están ralentizando simultáneamente”.
México no puede permanecer impávido ante el escenario económico mundial y debe tener herramientas fuertes para hacerle frente a los retos que se avecinan en 2023.
Con información de Publimetro