Los grandes consumidores aceleran su salida de las centrales de autoabasto
Las centrales de autoabasto se están quedando con menos socios. El número de consumidores –industriales y grandes empresas– que hacen uso de la electricidad generada en estos activos y que han solicitado dejar este esquema ha incrementado en los últimos meses , según fuentes de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y documentos de las sesiones públicas del regulador. Las centrales de autoabasto fueron diseñadas hace más de una década para la generación de energía de autoconsumo por parte de grandes clientes industriales –a los que la estatal CFE no les podía garantizar su abastecimiento– y la reforma energética de 2013 permitió la continuación de su funcionamiento. Pero la actual administración ha puesto a esta figura en el centro de la discusión del modelo eléctrico y ha acusado de manera continúa que el modelo se ha distorsionado y que grandes compañías han vendido electricidad a menores precios que la estatal, sin que ello esté permitido. En lo que va de este año, el regulador del mercado eléctrico ha aprobado en sus sesiones públicas la exclusión de 33 centros de carga a distintas centrales de autoabasto. Cada exclusión implica que un consumidor de una de estas plantas está decidiendo dejar el esquema.