Plan contra inflación frenó caída en consumo y salario
El gobierno federal estima destinar 574 mil millones de pesos para el plan contra la inflación, sin el cual ese indicador rebasaría 10 por ciento anual, el consumo y la recaudación habrían caído y el salario promedio mensual estaría 12 por ciento por debajo de los casi 9 mil pesos reportados en junio.
Así lo dio a conocer ayer el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rogelio Ramírez de la O, al presentar en la conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador una primera evaluación del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), que incluye el subsidio a combustibles y el acuerdo con los sectores agroindustrial y de autoservicio para evitar la subida de precios en 24 productos.
Por su parte, el mandatario federal destacó que las medidas se aplicaron a tiempo para no dañar la economía de las familias y subrayó que con éstas México va a la vanguardia y pone el ejemplo a escala mundial en el combate a la inflación.
Sin este paquete, la inflación habría sido 2.6 puntos porcentuales mayor a lo que es hoy, de 8.16 por ciento. Por eso es que, entre otras razones, la inflación de México está más baja que la de otros países, incluyendo Estados Unidos, subrayó el titular de Hacienda.
Agregó que con una inflación más alta habría caído el consumo de los hogares, y con ello el volumen de ventas, el IVA y todo el movimiento económico; al mismo tiempo, indicó, el Banco de México hubiese subido más la tasa de interés y así aumentaría el costo de la deuda pública y privada, de las hipotecas, así como de las tarjetas de crédito.
En cuanto a los ingresos de la gente, Ramírez de la O apuntó que sin la aplicación de estos apoyos, el salario promedio mensual que en junio de este año se colocó en 8 mil 943 pesos, estaría 12 por ciento debajo, lo que representaría una caída muy fuerte en las percepciones de los hogares.
Por lo anterior, el secretario remarcó: Este paquete está cumpliendo muchas funciones y estos recursos que están siendo utilizados en el paquete no tendrían un mejor uso que aquí.
Hasta ahora el costo para el Estado mexicano de mantener estas medidas contra la inflación –algunas estaban en marcha antes del Pacic– es de 574 mil 624 millones de pesos, que se distribuyen de la siguiente manera: 68 mil 874 millones para seguridad alimentaria, 430 mil millones para el subsidio a la gasolina (monto estimado para todo el año), 73 mil millones al de electricidad, y 2 mil 750 millones para el congelamiento de cuotas en carreteras.
El funcionario señaló que pese a los buenos resultados del Pacic, el gobierno federal continúa analizando estrategias para reforzarlo.
Afirmó, además, que el gobierno federal ha realizado un gran esfuerzo presupuestal con las reducciones a la mitad del IVA y del ISR en la frontera norte y bajando el precio de los combustibles. Estas acciones, estimó, han sido equivalentes en valor a una baja de impuestos generalizada y reiteró que no aumentarán ni se crearán nuevos gravámenes y que los recursos disponibles se usarán productivamente.
De su lado, el presidente remarcó que las medidas antinflacionarias son heterodoxas, éstas no las aplican los neoliberales, ellos satanizaron los subsidios y no les importaba proteger la economía popular, a nosotros sí, porque la inflación es un impuesto que afecta a los trabajadores, a los pobres, y tenemos que cuidar que no haya. Afortunadamente lo estamos logrando y aunque no les guste, porque los mexicanos no tenemos por qué ir a la retaguardia en lo que sucede en el mundo, ya vamos a la vanguardia, poniendo el ejemplo, aunque no le parezca, la inflación en México es menor a la de Estados Unidos y a la de Europa.
Subrayó que el peso es fuerte, ha resistido y no se ha devaluado; el costo de los energéticos en nuestro país es mejor que en la mayoría de las naciones del mundo, y la economía mexicana crece, a diferencia de otras.
Con información de La Jornada