¿Uniformes neutros? Sinaloa permitirá su uso en escuelas de educación básica
A partir del ciclo 2025-2026 entrará en vigor la medida. Madres y maestras la respaldan, aunque hay voces que piden más consulta.
Dheyna Brito
Culiacán, Sin. – Con la entrada en vigor de una nueva disposición de la Secretaría de Educación Pública y Cultura (SEPyC), las alumnas de educación básica en Sinaloa podrán usar pantalón como parte del uniforme escolar oficial a partir del ciclo escolar 2025-2026, sin que las escuelas puedan sancionar esta decisión o condicionarla.
La titular de la dependencia, Gloria Himelda Félix Niebla, explicó que esta medida representa un avance en materia de inclusión y seguridad escolar, al atender la incomodidad que muchas niñas han expresado por años frente al uso obligatorio de falda. “Esto no es por moda ni ideología. Es un asunto de derechos, de dignidad y de protección para las niñas. El uniforme no debe ser una barrera para que estén cómodas y seguras en la escuela”, declaró.
Según datos de Mexicanos Primero Sinaloa, el 19 % de las niñas y el 17 % de los niños en México reportan sufrir acoso escolar al menos una vez al mes. Por su parte, el informe PISA 2022 señala que el 22 % del alumnado mexicano no se siente seguro al ir a la escuela, y el 7 % dice sentirse inseguro dentro del aula. La medida irá acompañada de protocolos escolares para atender situaciones de acoso vinculadas al uniforme.
Para Paola Bernal, madre de una niña en primaria, esta reforma solo formaliza una práctica que muchas familias ya habían adoptado por decisión propia. “Mi hija lleva casi dos años usando short falda o pants. Al principio yo le pedía que al menos los lunes usara la falda para el homenaje, pero con el tiempo fui cediendo. Ella me decía que se sentía incómoda, que no podía correr bien, que los zapatos le molestaban. Y la verdad es que la escuela nunca puso objeción, así que la dejé decidir”, relata.
Paola destaca que su hija practica gimnasia y que usar ropa cómoda le permite disfrutar el recreo y en sus actividades físicas. “Se siente mucho más libre cuando trae pants y tenis. A ella le encanta hacer vueltas de carro y moverse sin que le estén diciendo que se siente bien o que se tape la falda”, cuenta. A pesar de que en su escuela nunca hubo sanciones, reconoce que otras madres de familia le han comentado que no todas las primarias públicas son igual de abiertas. “Depende mucho de la dirección. En mi caso, me siento afortunada”, afirma.

En la entrega de uniformes se estará canjeando por falda y/o pantalón. / Foto: Iván Medina / El Sol de Sinaloa
Además, el Gobierno del Estado informó que en el canje gratuito de uniformes del ciclo 2025-2026 se entregará falda y/o pantalón, según la preferencia de niñas y niños, reforzando que el uso del pantalón no será motivo de sanción ni podrá ser restringido por las instituciones educativas.
En las calles, madres de familia también expresan su respaldo a la medida. Irene Ortega, con tres hijas en nivel básico, considera que la libre elección debe partir desde casa: “Si es por comodidad, si es por facilidad o simplemente porque les gusta, son libres de elegir. De hecho, yo creo que ni siquiera me tienen que preguntar.”
Perla, otra madre consultada, apunta que el pantalón representa un alivio frente al clima y el acoso escolar: “Está bien porque es más cómodo. Por ejemplo yo, pues me pican mucho los moscos y siento que es mejor. Además, muchos niños son bien groseros y eso causa acoso también con las niñas.”
Isabel, por su parte, comparte que ha permitido a su hija usar pantalón ocasionalmente: “Sí, se puede, pero no todo el tiempo. Muchas veces por la falda, que a veces está muy corta, a mí casi no me gusta que la use. Yo la cuido mucho de que lleve short abajo y se cubra bien.”

Opiniones encontradas entre los padres de familia. / Foto: Iván Medina / El Sol de Sinaloa
Desde otra perspectiva, Paulina, madre de una niña en primaria, valora que se priorice la comodidad infantil: “Pues lo que anden más cómodos los niños para mí me parece genial. Entre más podamos ayudar a los niños a estar cómodos en todos los aspectos me parece mejor.”
No todas las voces son completamente favorables. Pamela expresa dudas sobre los alcances de la medida y cree que podría generar confusión en edades tempranas si se interpreta que también los niños pueden usar falda: “Si es para las niñas no lo veo tan mal, pero para un niño sí. Siento que se va a desviar por el lado sexual.”
Una de las principales confusiones alrededor de la medida ha sido su interpretación como una propuesta para que los niños usen falda. Sin embargo, en cuanto se aclara que se trata principalmente de permitir a las niñas vestir pantalón o short falda sin restricciones, algunas posturas críticas se mantienen.

Los padres de familia no fueron consultados ante esta iniciativa. / Foto: Iván Medina / El Sol de Sinaloa
Tal es el caso de Carmen Fernandez, madre de familia, quien considera que aunque no se trate de una imposición de género, este tipo de cambios debilita el valor formativo del uniforme. “Yo creo que es mejor conservar la disciplina de siempre. Si todos usamos uniforme, es por orden y respeto. No todo se les debe dejar elegir a los niños desde pequeños”, opinó. Carmen insistió en que las familias debieron ser consultadas antes de hacer oficial esta modificación.
Desde su experiencia en el aula, Inés Arce, maestra de primaria, asegura que muchas docentes no han recibido información suficiente sobre la disposición, pero que, aun así, la práctica ya estaba normalizada entre las niñas. “En mi grupo hay niñas que todo el año usan pants. Solo llevan falda cuando hay evento, como el acto académico. Y lo hacen por decisión propia. Nunca las he obligado a vestir de una forma u otra”, cuenta.
Arce señala que la comodidad es clave para el aprendizaje. “Una alumna que se siente incómoda por su ropa difícilmente va a estar concentrada. Además, muchas niñas me dicen que sus mamás también se sentían incómodas usando falda cuando iban a la escuela. Entonces las apoyan totalmente. Y yo también. Mientras estén a gusto, no hay problema.”

Esto es una herramienta de inclusión. / Foto: Iván Medina / El Sol de Sinaloa
Sobre posibles confusiones, la maestra es clara: “Nunca he escuchado comentarios de que los niños quieran usar falda. Esta medida va más bien por el lado de las niñas que quieren usar pantalón y que ya lo hacen. Solo que ahora, con respaldo.”
El debate por el uniforme neutro también llegó al Congreso local. Durante la sesión del 22 de julio, los diputados Manuel Guerrero Verdugo (Morena) y Jorge González Flores (PAN) fijaron posturas opuestas: Guerrero defendió la medida como una herramienta de inclusión y libre desarrollo de la personalidad; González, en cambio, advirtió sobre riesgos de bullying y cuestionó si niñas y niños tienen la madurez suficiente para decidir su vestimenta escolar.
Desde el Poder Legislativo, la diputada María Teresa Guerra Ochoa, presidenta de la Junta de Coordinación Política, respaldó la disposición, al considerarla alineada con el protocolo estatal contra el acoso escolar aprobado en 2024. Este obliga a garantizar entornos libres de violencia y reconoce la libertad de vestimenta como parte de los derechos escolares. “Se trata de romper estereotipos que han limitado la participación y comodidad de las niñas en las aulas”, afirmó.
En sentido contrario, el diputado Serapio Vargas Ramírez (Morena) manifestó su desacuerdo, al considerar que permitir que niños usen falda podría confundirse con libertinaje. “No debe confundirse libertad con permisividad absoluta”, señaló.

Esto es a favor de los derechos de las niñas, niños y adolecentes. / Foto: Iván Medina / El Sol de Sinaloa
A las posturas legislativas se sumaron las de organizaciones civiles como Vía Familia, encabezada por Ana Laura Hernández Meijueiro, y el Frente Nacional de la Asociación de Padres de Familia, dirigido por Francisco Ortiz. Ambos rechazaron la medida al considerarla una “imposición ideológica” que invade la libertad de las familias para educar. Ortiz fue más allá, calificándola como una iniciativa “tonta” que distrae de problemáticas prioritarias como la seguridad o el desempleo.
En contraste, Sinaloa Incluyente A.C., a través de su director Tiago Ventura, defendió la política como un avance justo en materia de derechos humanos. “El uniforme neutro no confunde; ofrece opciones y elimina barreras. El libre desarrollo de la personalidad está por encima de opiniones morales particulares, y es deber del Estado garantizarlo”, declaró. Ventura subrayó que “la ropa no tiene ideología, pero sí la tiene el intento de restringir derechos”.
Porque al final de todo, lo que está en juego no es una prenda ni una norma. Es el derecho de niñas, niños y adolescentes a crecer con libertad, con respeto y sin miedo a ser señalados por cómo se visten. Y frente a eso, no caben retroceso.
Con información de El Sol de Sinaloa