DE LA TINTADA

Gabriel Cota Luque

Cuando están por cumplirse los primeros 100 días de los nuevos gobiernos, tanto del estado como en los 18 municipios de la entidad, se alistan los análisis de lo hecho y lo que se ha dejado de hacer.
Sobre todo es buen momento para definir el verdadero sentir que impera entre la población sobre lo que mucho se prometió durante el tiempo de campaña electoral y lo que se le ha cumplido.
Hay que decir que en términos generales los nuevos gobiernos están cumpliendo los principios de la llamada Cuarta Transformación, sobre todo en materia de austeridad y modificación de algunos programas y esquemas sociales.
Aunque se puede argumentar que esto apenas inicia y que los primeros 3 meses no son suficientes para marcar el rumbo de un gobierno, bien puede decirse que entre la población y la clase política se tiene una opinión conforme le está yendo en la feria.
En ese sentido, llama la atención la política de apertura que de parte de este primer gobierno de izquierda en Sinaloa para mantener vigentes a muchos cuadros del viejo sistema priísta y hasta algunos panistas.
Eso, aunque silenciosamente hasta el momento, es lo que ha empezado a generar ruido entre quienes le apostaron al gobierno del cambio y de la prometida transformación.
Si bien desarticulados como partido político, pues Morena carece de una estructura formal de dirigencia, entre las bases morenistas sí está llegando la temprana frustración de ver como muchos de los espacios en el poder siguen siendo para los mismos de siempre, para encumbrados priístas.
Tal vez esa falta de verdadera estructura partidista es la primera traba que tiene la gente de Morena para ser tomados en cuenta por los nuevos gobernantes, a quienes no les importa la labor que realizaron a su favor en el pasado proceso electoral.
Al estilo del PRD, de donde viene la verdadera clase política izquierdista, en Morena lo que figuran son grupos, pero sin una real directriz y cuadros visibles a quien recurrir, y por ello el desdén que ahora padecen para acceder a los espacios en los nuevos gobiernos.
La frustración y enojo es mayor cuando ven que la mayoría de las posiciones son entregadas a viejos priístas, a quienes nunca vieron en la talacha proselitista a favor de los candidatos de Morena, pero que hoy, como ayer, siguen disfrutando las mieles del poder.
Un caso concreto es el de Juan Francisco López Orduño, viejo militante del PRI, por cuyas siglas se convirtió en Síndico Procurador y regidor en pasados gobiernos en Ahome y ahora despacha como titular de la Dirección de Trabajo y Previsión Social del Gobierno del Estado en la ciudad de Los Mochis.
Lo que más irritó a algunos morenistas, y que es lo que está generando esta creciente rebelión, es que esa posición ya había sido ofrecida a uno de los suyos, a quien cuando se alistaba para asumir el cargo se le enteró que siempre no, que esa posición sería para el también dirigente transportista, quien a su favor puede aducir la relación personal que lo une con el gobernador Rubén Rocha Moya, cuando ambos eran parte de la planta laboral en la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Pero ese mismo ejemplo lo ven los hoy frustrados militantes de Morena en los gobiernos municipales, como Ahome y El Fuerte, donde sigue encumbrada mucha de la vieja guardia priista y el pastel cada vez ya tiene menos que repartir.
Dicen que el argumento que recibían al arranque de las nuevas administraciones es que se esperarán a los primeros 100 días, que sería el tiempo en que se darían los reacomodos y con ello su ingreso al gobierno.
A punto de cumplirse el plazo, lo único que ven pasar es el tiempo y que conocidos priistas siguen llegando a diversas responsabilidades en los gobiernos de la 4T.
La irritación entre la verdadera clase morenista va creciendo y amenazan con hacerla sentir en próximos comicios, como el ya cada vez más cercano 2024 o en los plebiscitos a síndicos, que en el caso de Ahome será este domingo 6 de febrero.
Como ya lo habíamos anotado en anteriores colaboraciones, en el municipio es claro el afán del alcalde Gerardo Octavio Vargas Landeros de hacer ganar a sus allegados, que más que con Morena están identificados con su grupo político El Trébol y con el viejo pero no desaparecido PRI.
De hecho llama la atención como el exinvencible tricolor está vez no entró al juego y sus militantes se han volcado en apoyo a los candidatos oficiales, quienes fueron sus contras en el pasado proceso constitucional del 6 de junio.
La oposición para Gerardo Vargas y El Trébol la representan esos morenistas renegados o decepcionados, o sus anteriores aliados del Partido Sinaloense, que también impulsan candidatos propios en algunas sindicaturas.
Los resultados finales los conoceremos este domingo.
EL PADRINO Y EL AHIJADO
Hablando de Gerardo Vargas, 2 asuntos a destacar.
Por un lado su extraordinario posicionamiento en recientes encuestas nacionales, donde figura en la posición 2 y 3 de los mejores alcaldes evaluados en el país, una de ellas apenas superado por la presienta municipal de Tepic, Nayarit, María Geraldine Ponce Méndez. ¡¡¡Ni tonto que no fuera!!!
Y por otro, súper comentada la fotografía que este jueves divulgó en sus redes sociales sobre el reencuentro con quien fuera su contrincante en el pasado proceso electoral, el candidato del Partido del Trabajo, José Domingo Vázquez Márquez.
“Excelente reencuentro con mi ahijado político”, tuiteó el munícipe, presumiendo haber tenido una plática, como siempre, “con respeto a la añeja amistad y con el mismo deseo de trabajar juntos por un mejor Ahome”.
El exdirigente del sindicato de electricista y quien ahora a cobra como delegado de la Secretaría de Turismo del Gobierno del Estado en la zona norte se había negado a un encuentro público con “su padrino”, a quien decía no reconocer su triunfo del pasado 6 de junio en las urnas.
Todo hace indicar que al final no fue necesario devolver lo de la partida y, ahora, de nuevo, tan amigos como siempre, y tan ahijados y tan padrinos.
Tanto que incluso se asegura que Mingo Vázquez ni siquiera se metió en el actual proceso para síndicos, aun cuando muchos de quienes fueron sus principales promotores andan en busca de la representación en sus respectivas sindicaturas.
Tanto Isaías Zavala como Horacio Álvarez se quejan del abandono del que son objeto por parte del “ahijado prodigo”.
LISTO EL RELEVO MAGISTERIAL
Finalmente, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación lanzó este jueves la convocatoria para la elección de su nueva dirigencia en la Sección 53.
El proceso, que por primera vez será mediante el voto secreto y universal de todos los agremiados, será este viernes 25 de febrero y están listos ya los 2 contendientes por la secretaría general que todavía ostenta José Fernando Sandoval Angulo.
Por el lado disidente, agrupados en Convergencia 53, se tiene como candidato a Alfredo Heredia mientras que por la vía oficial, impulsado por la actual estructura sindical, el contendiente es el profesor sinaloíta Ricardo Madrir Uriarte.
Hagan sus apuestas.

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