El agua de la huasteca potosina no saldrá de San Luis Potosí, y menos para abastecer a Nuevo León en la sequía que dicho estado atraviesa, así lo confirmó el gobernador Ricardo Gallardo.

Esto, luego de que el mandatario fuera cuestionado respecto a los señalamientos hechos por el dirigente nacional de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, quien señaló que las autoridades potosinas no tienen la potestad de impedir un proyecto como el Monterrey VI.

De hecho, tan grande sería la defensa del gobierno potosino con su agua que Gallardo Cardona aseguró que, de ser necesario, se encadenaría a la maquinaria para que nadie toque el vital líquido de su entidad.

Lo que ellos quieren hacer es un ecocidio y no lo vamos a permitir, no lo van a lograr, así sea necesario ir yo personalmente a atravesarme en las obras y amarrarme a las máquinas, yo sé que muchos potosinos me van a seguir, no se van a llevar el agua de San Luis Potosí”, declaró.

El político de 41 años insistió que no solo Nuevo León está necesitado de agua, San Luis Potosí también sufre de este mal ocasionado por la falta de lluvias.

El problema, declaró Gallardo, es profundo y los ha hecho dirigirse con los ejidatarios de la zona huasteca para evitar que utilicen el agua de los ríos para sus parcelas, hecho que traería consecuencias a los parajes turísticos.

Ricardo Gallardo Cardona había descartado enviar agua a Nuevo León apenas el pasado mes de febrero, cuando calificó esta hipotética acción como “una locura”.

Sería una locura que después del gran estiaje que se vive en San Luis Potosí, y el mega fraude de obra que significó el proyecto de El Realito por 5 mil millones de pesos, ahora además se permita que los afluentes de agua de la zona Huasteca sean utilizados para surtir de agua al estado de Nuevo León”, comentó en su momento.

 

Con información de Excelsior

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